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El Venado de las Pampas fue categorizado En Peligro, de las cuatro poblaciones actualmente existentes en Argentina, una se encuentra en la provincia de Santa Fe, distribuído en los Bajos Submeridionales del distrito Fortín Olmos, departamento Vera. Sobre una superficie de 23.000 has. Su tamaño poblacional no está evaluado adecuadamente, sin embargo con la suma de evidencias indirectas y entrevistas a pobladores rurales se podría establecer un número estimativo de 50 individuos. El tamaño medio de grupo es de 2,07 individuos (n=13), siendo 53,86 % de individuos solitarios, 15,38 % de grupos de dos individuos, 15,38 % de grupos de tres ejemplares y 15,38 % de grupos con más de tres individuos, siendo el número máximo de 6 ejemplares. El área de venados está ubicada en una amplia región con drenaje pobre sometida a inundaciones y sequías prolongadas. La característica destacada en la vegetación es la escasez del elemento arbóreo, y la tres cuarta parte del área está compuesta por espartillares de Spartina argentinensis. El ciclo de astas es poco conocido y con información anecdótica. Respecto a la temporada de cría, datos aislados señalan pariciones en los meses de octubre y juveniles en enero y febrero. Entre los predadores naturales está el aguará guazú (Chrysocyon brachyurus) y el zorro pampeano (Pseudalopex gymnocercus). Toda el área está destinada a la cría extensiva de ganado bovino. En rededor de puestos se cría además ganado caprino. Los pastizales son manejados con fuego para mejorar la receptividad del ganado, pudiendo los venados aprovechar el verdeo post-quema. Sin embargo las quemas no son planificadas El uso del pajonal de Spartina argentinensis para el ganado doméstico se basa en el rebrote de éste, posterior a estas quemas. La técnica utilizada puede ser el manchoneado o quemado overo, que consiste en quemar donde y cuando se pueda y haga falta forraje. Este fuego recorre algunos metros hasta detenerse en algún cortafuego o manchón anterior, quedando de esta forma delimitado el nuevo manchón. Otra técnica usada es el quemado de áreas grande o total, en este caso los espartillares arden día y noche durante varias jornadas sin que haya un límite establecido para su extinción. Estas técnicas tienen la ventaja de la simplicidad y bajo costo, sin embargo el uso que se hace del pastoreo no es el adecuado. No hay control sobre la superficie quemada, o sobre la cantidad de forraje que producirá luego de la quema. Por ello es común ver en un extremo superficies quemadas no aprovechadas y en el otro extremo superficies quemadas sobrepastoradas y salinizadas. La población fue redescubierta en el año 1997 y desde entonces se viene realizando trabajos con pobladores (entrevistas, educación para la conservación, etc.). En el año 2001 se desarrolló la Primer Reunión para la conservación del venado de las Pampas en Santa Fe, liderada por la SEMADES y el Proyecto Venados. Éste encuentro desencadenó en el Plan Provincial redactado en el año 2003.