INVESTIGADORES
ROZENWURCEL Guillermo
libros
Título:
Tecnología+Recursos Naturales. Innovación a escala Mercosur 2.0
Autor/es:
G. ROZENWURCEL, H.THOMAS, G. BEZCHINSKY, C.GIANELLA
Editorial:
Universidad Nacional de San Martín
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2011 p. 330
ISSN:
978-987-33-0069-1
Resumen:
Luego de superada la crisis de inicios del siglo xxi, los países de América del Sur, en particular los países miembro o asociados del Mercosur, han sostenido a lo largo de varios años elevadas tasas de crecimiento. Es más, la nueva crisis internacional desencadenada en los Estados Unidos en 2008 tuvo costos relativamente bajos y fue rápidamente superada en la región, que ya en 2010 volvió a crecer a tasas significativas.Mejores fundamentos macroeconómicos, una política menos errática y una dinámica interna menos volátil y más previsible que la de las dos décadas precedentes indudablemente contribuyeron al logro de tan esperanzadores resultados. Pero no es menos cierto que la emergencia en el escenario internacional de China y la India, la sostenida demanda de materias primas y productos primarios resultante y la vigencia de términos de intercambio excepcionalmente favorables para los países de la región han impulsado ese buen desempeño.Nadie puede saber cuándo va a cambiar tan excepcional escenario internacional. Pero no caben dudas de que no será eterno. Para aprovechar la ventana de oportunidad abierta y hacer frente a las incertidumbres que actualmente se ciernen sobre la economía mundial, las economías de la región precisan agregar valor a su producción primaria basada en la explotación de recursos naturales, diversificar su estructura productiva y modernizar sus sectores industriales y de servicios de baja productividad.Como parecen tener crecientemente en claro los países relativamente más avanzados del acuerdo subregional (Argentina, Brasil, Chile y Uruguay), desarrollar activamente las actividades de ciencia tecnología e innovación vinculándolas con el sistema productivo es un componente crucial en ese proceso. De hecho, aunque con diferentes orientaciones y recursos disponibles, los cuatro países mantienen una actividad regular en ciencia, tecnología e innovación, tanto en el sector público como en el privado, y la promueven con políticas públicas específicas.En efecto, Brasil y Chile –este último incluso estableció un impuesto de afectación específica al financiamiento de la innovación– lograron significativos aumentos en sus ratios de i+d con respecto al producto interno bruto (pib). Argentina, a su vez, también está realizando un significativo esfuerzo presupuestario y negoció nuevos préstamos de los organismos financieros internacionales para apoyar programas de innovación. Además, los cuatro países están jerarquizando a las agencias públicas responsables del tema: en Brasil se creó la Agencia Brasileña para el Desarrollo Industrial, en Chile la Agencia de Innovación para la Competitividad, en Argentina el Ministerio de Ciencia y Tecnología e Innovación Productiva y, por último, en Uruguay la Agencia Nacional de Investigación e Innovación.No obstante, a pesar de haber colocado la temática en un lugar destacado de sus estrategias explícitas o implícitas de desarrollo, la cooperación en materia de ciencia, tecnología e innovación es un tema que no ha aparecido con la misma intensidad ni en el discurso oficial ni en la práctica del proceso de integración.En este sentido, resulta evidente que la actual dinámica innovativa en los países del Mercosur ha mostrado una escasa interactividad intrarregional, pobres niveles de institucionalización y enormes dificultades para promover iniciativas de cooperación o emprendimientos conjuntos en actividades de producción, investigación y desarrollo. De hecho, la actividad a escala regional del Mercosur parece significativamente menor que la de la mayoría de sus países miembro considerados de manera aislada.Sin embargo, es posible registrar diversos niveles de interacción: flujos comerciales intrarregionales relevantes que incluyen transferencia de tecnología incorporada en bienes y servicios, complementariedades productivas entre empresas radicadas en diferentes países miembro, proyectos cooperativos de i+d (investigación y desarrollo), intercambio de estudiantes e investigadores.Relevar los flujos y analizar las interacciones existentes y potenciales, así como tratar de responder a las preguntas: ¿es posible impulsar dinámicas innovativas en la región?, ¿dónde están las mayores ventajas, facilidades y complementariedades?, ¿dónde se concentran las mayores capacidades y déficit?, ¿cuáles son los instrumentos de cooperación regional más funcionales?, ¿cuáles son las áreas prioritarias de actuación?, no es solo un trabajo de valor académico. Al mismo tiempo, y fundamentalmente, constituye un insumo clave para el diseño de estrategias regionales (del Mercosur) y nacionales.A partir de estos interrogantes, en este libro enfocamos la atención en la relación entre el Sistema Regional y los sistemas sectoriales de innovación.Esto es así porque consideramos que en el marco del actual proceso de internacionalización de la economía, la profundización del proceso de integración económica en la región requiere explorar cómo se pueden crear, a partir de las capacidades existentes, mecanismos regionales de cooperación en i+d+i (investigación, desarrollo e innovación) en algunas de las tecnologías clave del nuevo patrón tecno-productivo mundial, en particular en las tecnologías de la información y comunicaciones (tic) y la biotecnología.En otras palabras, nos propusimos indagar los modos y a través de qué mecanismos, la interactividad y los emprendimientos conjuntos en actividades de i+d en algunos de los sectores que en nuestros países están en mejores condiciones de incorporar, adaptar y desarrollar esas tecnologías, podrían reforzar la dinámica innovativa en general al interior del bloque, favorecer la generación de redes regionales, evitar la ampliación de brechas de desarrollo entre los socios y lograr una inserción virtuosa en las redes globales de producción.