INVESTIGADORES
CASTILLO MERLO Mariana Carolina
congresos y reuniones científicas
Título:
Emociones trágicas: sobre la necesaria convergencia de compasión y temor
Autor/es:
CASTILLO MERLO, MARIANA
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Jornada; XVIII Jornadas de Estudios Clásicos "Maestros y discípulos en el mundo grecolatino"; 2021
Institución organizadora:
Instituto de Estudios Grecolatinos Francisco Novoa, dependiente de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Católica Argentina
Resumen:
En el marco de Poética, Aristóteles no explicita en qué consisten las dichas emociones trágicas y, en la mayoría de las apariciones de los términos, las consideraciones refieren a la naturaleza de la tragedia, pues es el tipo de mímesis que logra generar dichas emociones (1449b 27, 1452b 1, 1453b 12), y a la cualidad de los personajes que se pondrán en escena para generar dichas pasiones, de modo que surja temor al contemplar el infortunio de un semejante y compasión, frente al que sufre un inocente (1452b 36-1453a 7). Sin embargo, estas referencias no arrojan luz para entender cuál es la importancia de lograr un efecto catártico de estas (y no de otras) emociones en los espectadores, ni tampoco aclaran en qué sentido puede resultar placentero ver al personaje de la tragedia expuesto al infortunio, qué aprendizaje es posible a partir de la contemplación de la mímesis de una vida atravesada por el sufrimiento y cómo ese espectáculo, que gira en torno a la fragilidad de la acción, puede interpelar a su audiencia y salir del ámbito del teatro para convertirse en una herramienta para la vida en la pólis.La mayoría de quienes sostienen una lectura ético-política de la Poética admiten, explícita o implícitamente, que la emoción trágica realmente importante es la compasión. En este trabajo intentaré sostener, siguiendo la propuesta de Destrée y a la luz de una selección de pasajes de Poética, Retórica y Sobre los poetas, las características de la compasión y el temor que hacen posible su convergencia y necesaria complementariedad. De esta manera, pretendo señalar de qué manera operan ambas emociones para contribuir al aprendizaje mimético que Aristóteles le adjudica a la tragedia.