BECAS
TORRES RESSA NicolÁs RaÚl
congresos y reuniones científicas
Título:
La magia según Plotino. un arte ontológicamente devaluado
Autor/es:
TORRES RESSA, NICOLÁS RAÚL
Lugar:
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Reunión:
Jornada; V Jornadas Interdisciplinarias de Jóvenes Investigadores de la Antigüedad Grecolatina; 2019
Institución organizadora:
Facultad de Filosofía y Letras (UBA)
Resumen:
El objetivo de esta comunicación consiste en dar respuesta a las siguientes dos preguntas: en primer lugar, ¿según Plotino, el mago puede manipular la voluntad del kósmos? ; en segundo lugar, ¿podemos establecer una relación entre la respuesta a la primera pregunta con la ontología general plotiniana? El Licopolitano reflexiona sobre la magia en la Enéada IV 4 [28], casi sobre el final del tratado, tras haber examinado las características del alma del universo y las de las almas de los astros. Las nociones de ?magia? y ?universo? se hallan profundamente entrelazadas: en el capítulo 40 del tratado ya mencionado, el pensador neoplatónico define la magia (mageía) como un arte que obra a partir de la amistad y la discordia (philía kaí neíkos) que existen en el universo; por su parte, el universo ya había sido descripto en el capítulo 32 como un ?animal unitario? (zóon synteloúnton) que abarca a todos los animales que están dentro de él. Todos los seres del mundo sensible son ?partes? del universo, de manera análoga a los distintos miembros de un cuerpo. Algunas partes guardan afinidad entre sí, mientras que otras se repelen; el universo, sostiene Plotino, es el ?primer mago y hechicero? (prótos pharmakeús kaí goés) porque dispone de todas sus partes de la manera más armoniosa posible. Pocas líneas después, el Licopolitano afirma que algunos hombres pueden ?direccionar? los influjos de algunos seres sensibles (como, por ejemplo, de los astros) a otros hombres, para de este modo producir efectos perjudiciales en ellos. Esto nos lleva a la primera pregunta de nuestra comunicación, a la que respondemos negativamente: los influjos del universo no son actos conscientes, sino que son efectos involuntarios ?desprendidos? de cada ser, de la misma forma que el sol emite involuntariamente calor. Por lo tanto, el mago nada puede hacer frente a la voluntad y el alma del universo; el alma del universo no es siquiera consciente del ?destino? de sus influjos, pues su actividad contemplativa está puesta sobre la segunda hipóstasis, la Inteligencia. El kósmos no le ?niega? sus influjos al hombre que quiere emplearlos para mal, del mismo modo que un río no le niega el agua a nadie; sin embargo, lejos de ?dominar? al universo, ese mago (señala Plotino) deberá hacerse cargo de las consecuencias de su acción. Por otro lado, aquellos que llevan una vida virtuosa (es decir, quienes contemplan las realidades superiores, igual que el alma del universo) son inmunes a los efectos de la magia. Este punto nos lleva a la respuesta a nuestra segunda pregunta: la noción plotiniana de ?magia? dice mucho acerca de su valoración de la realidad sensible, acerca de la cual afirma (en un tratado algo posterior como lo es II 9 [33] titulado Contra los gnósticos) que es la copia más bella que puede haber de la realidad inteligible, pero copia al fin y al cabo. La magia tiene efectos sobre la parte más ?baja? del universo (la más próxima al más bajo de todos los niveles ontológicos: la materia sensible) sin embargo, nada puede hacer frente a la más ?alta?, la más cercana al siguiente nivel ontológico, que es la Inteligencia.