BECAS
GRASSO ludmila
congresos y reuniones científicas
Título:
Un disfraz para ser monstruo. El disfraz como vehículo de subsistencia en Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán.
Autor/es:
GRASSO LUDMILA
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Congreso; VI Congreso Internacional CELEHIS de Literatura; 2017
Institución organizadora:
CeLeHis/ Universidad Nacional de Mar del Plata
Resumen:
El objetivo del siguiente trabajo es dar cuenta de cómo en Guzmán de Alfarache, de 1599, se cristalizan las problemáticas de una España convulsionada bajo el reinado de los Austrias menores y la institución de la Inquisición. El eje de mi análisis busca dar cuenta que la sociedad española del Siglo de Oro era monstruosa. Para ello debe considerarse el concepto de monstruo físico, entendido como un ser con un cuerpo formado por partes, desmembrado y desagradable para el considerado 'normal' de la gente. Las prácticas inquisitoriales imponen un régimen de represión y de miedo constante que obligaba a las personas a transformarse para parecer 'normales', es decir, cristianos devotos. Esto, sumado a la inquietud generalizada, termina por deformar a la sociedad y volverla un monstruo. En una sociedad monstruosa, entonces, que engendra monstruos, el disfraz se hace imprescindible para que los excluidos puedan integrarse. Deben disfrazarse de monstruos, de esos monstruos aceptados por la sociedad Católica y Monárquica de la España de los Habsburgo. Ser mendigo y ser cristiano devoto son dos disfraces excelentes, que representan los valores de la época, y permiten subsistir en una sociedad controladora y represora. Debe tenerse en cuenta que el disfraz lleva siempre aparejado un cambio o trasformación física. Partiendo de estos conceptos, primero analizaré el lugar del disfraz, imprescindible para integrarse en una sociedad monstruosa en los capítulos I y V de la primera parte de Guzmán de Alfarache. En segundo lugar, indagaré las figuras del mendigo (pícaro) y del converso buscando trazar un puente con el concepto de monstruosidad.