BECAS
NI MÓnica
congresos y reuniones científicas
Título:
Circulación de saberes psicológicos en la Argentina e Iberoamérica: distinciones metodológico-epistémicas
Autor/es:
FLORENCIA ADRIANA MACCHIOLI; LUCIANO NICOLÁS GARCÍA; SEBASTIÁN MATÍAS BENÍTEZ; VICTORIA MOLINARI; ANA BRIOLOTTI; MAIA NAHMOD; MÓNICA NI
Lugar:
San Luis
Reunión:
Encuentro; Encuentro Argentino de Historia de la Psiquiatría, la Psicología y el Psicoanálisis; 2019
Institución organizadora:
Facultad de Psicología, Universidad Nacional de San Luis
Resumen:
A partir del análisis de los procesos de circulación, recepción y traducción de saberes psicológicos en la Argentina, el presente trabajo pretende delimitar conceptualmente una serie de herramientas metodológicas que permitan llevar a cabo un estudio pormenorizado de los mismos, centrado en las relaciones intra-territoriales en la Argentina y sus relaciones con algunos países o ciudades de Iberoamérica.Por una parte, la perspectiva de la historia transnacional es central ya que busca reconstruir mecanismos interdependientes relacionados a la circulación de saberes, objetos y personas: la conformación de instituciones y programas académicos integrados en redes internacionales; la migración transnacional de intelectuales y científicos; y las políticas de intercambios académicos y científicos (Heilbron, Guilhot, Jeanpierre, 2008; Walker, 2012; Saunier, 2013). Este enfoque da cuenta de la autonomía relativa de ideas, científicos e intelectuales respecto de las culturas nacionales y las instituciones estatales. Este enfoque, aunque relativiza el papel del Estado-nación en la producción de saberes, no por ello lo minimiza o lo abandona a priori (McGerr, 1991; Doel, Hoffmann & Krementsov, 2005; Turchetti, Herran & Boudia, 2012). Se trata, entnces, de reconstruir la relación entre los intelectuales y las condiciones locales e internacionales de un modo más detallado y advertido.Por otra parte, otro de los aspectos a considerar es que la circulación de saberes también implica jerarquías, mecanismos económicos y de poder. En estos términos, la distinción centro/periferia se vuelve relevante, y ha adquirido nuevamente preeminencia en la literatura internacional (Wallerstein, 2005; Beigel, 2013; Carvalho Castro, 2014). La distinción es muy pertinente para dar cuenta de las rutas específicas de circulación de saberes, los modelos con los cuales se produce conocimiento, se reproducen instituciones y se emulan las prácticas. Las asimetrías culturales y materiales entre los países centrales (Europa y EE.UU.) y la periferia (América Latina, África, Asia) no suponen una degradación de los saberes e ideas que son recibidas desde los primeros hacia las segundas, sino una transformación mediante su adaptación a las condiciones locales. Ello pone de relieve la productividad de las diferencias socio-económicas y políticas en la circulación de ideas, saberes y productos culturales. La distinción centro/periferia no puede concebirse como una relación fijada y permanente para todo saber, y por tanto la ?periferia? misma se vuelve relevante como objeto de estudio y posicionamiento para el análisis. No cabe entonces asumir asimetrías o hegemonías de los ?centros? fijas y permanentes, sino que es necesario indagar esas relaciones para dar cuenta de su constitución y sus cambios. Algunos estudios han mostrado que los saberes científicos tienen interacciones complejas y distribuidas entre diversos centros y periferias (Crawford, 1992), y que la psicología, la psiquiatría y el psicoanálisis han sido saberes cuyos escenarios de producción han pasado de ser centros a periferias y viceversa (Damousi & Plotkin, 2009; Danziger, 2010; Marková, 2012). La distinción centro/periferia entonces será considerada como una relación históricamente fluida, donde las asimetrías están ligadas a coyunturas específicas y deberán ser reconstruidas en cada investigación.Respecto de la circulación de saberes psicológicos en la región sudamericana, el campo de la historia de la psicología ha crecido considerablemente en la última década (ej. Fachinetti, Talak, Jacó-Vilela y Klappenbach, 2014; Klappenbach y Jacó-Vilela, 2016 ; Castro-Tejerina, 2016) y comienza aparecer una literatura específicamente orientada a ubicar el espacio de América del Sur y América Latina como unidades de análisis (ej. Sánchez-Sosa y Valderrama-Iturbe, 2001; Alarcón, 2004; González Rey, 2009; Torre, 2010; J. E. García, 2014; Salas, 2014, Gallegos, 2016). El marco de estudio propuesto permite además considerar dos dinámicas específicas pero interrelacionadas: en primer lugar, la relación compleja del contexto local con América Latina y los denominados países periféricos de Europa (Sorlin, 2000; Gavroglu et al., 2008; Panelopoulou, Nieto-Galan & Perdiguero, 2009), muy especialmente España, y también con otras zonas consideradas regularmente como periféricas, en particular China (Wei-Ming, 2005), frente a las cuales pueden verse pautas de relación y procesos diferentes a los habituales con centros como Francia y EE.UU. En segundo, la relación entre metrópoli y provincia, que reproduce la de centro y periferia, es decir cómo las ciudades principales de dentro de un territorio o región se vinculan entre ellas (Agüero y García, 2016). Entre este punto, se abordarán las relaciones entre diferentes tipos de ?periferias?, consideradas ya no en términos nacionales, sino de ciudades y regiones, y reconstruir críticamente qué significan estos posicionamientos, cómo se conformaron los circuitos de difusión de saberes, objetos y personas, en qué medida han sido productivos o no, y cómo cambian históricamente sus roles.