INVESTIGADORES
TACCETTA Natalia Roberta
congresos y reuniones científicas
Título:
Paisajes… Un acercamiento al situacionismo desde Walter Benjamin
Autor/es:
NATALIA TACCETTA; MARIANA SANTANGELO
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Jornada; I Jornada Poshegeliana: Kierkegaard y Marx o el fin de la filosofía; 2011
Institución organizadora:
Instituto de Ciencias de la Universidad Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS) y el Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini (CCC)
Resumen:
Benjamin se explaya sobre la sensación de vértigo con la que el siglo XIX conceptualizaba la historia y anuncia una investigación que pretenderá poner en evidencia el modo en que “la representación cosista de la civilización, las formas de vida nuevas y las nuevas creaciones de base económica y técnica que le debemos al siglo pasado entran en el universo de una fantasmagoría”. El pasaje parisino, primera realización de la construcción con hierro, fantasmagoría del mercado, aparece como la creación del siglo XIX que se identifica con estas ideas. En esta misma dirección, aparecen otras “fantasmagorías propias de la civilización” como el mismo Haussmann, artífice de las transformaciones de París. Este prefecto –que había contado con la simpatía de Napoleón III- llevó el urbanismo a una fase militar y policial al concebir la ciudad como un fuerte para combatir la subversión interna. Con su planificación, París se puebla de avenidas rectilíneas que, de una forma u otra, se conectan con el cuartel y se consolida una cartografía estructurada que, según Haussmann, permitiría combatir además, el cólera y las revueltas con barricadas. Es justamente a esta ciudad coreografiada que respondió el levantamiento de la Comuna, mediante el cual el proletariado sintió que “reconquistaba París, su ciudad y su voluntad de gestionarla”. Entre fascinado y horrorizado, Benjamin percibe la moderna metrópoli a través de categorías baudelerianas que permiten el abordaje de la ciudad a través de una lógica historiográfica fragmentaria. Siguiendo un elogio del montaje, lee la ciudad dislocadamente, rastreando la conflictividad inmanente, que posibilita pensar la ciudad de forma escorzada configurando una trama espacial de choques en los que, como imágenes dialécticas, aparece la verdad que puede romper con el orden histórico-político establecido. Es así que esta lógica del montaje hace explotar el relato del tiempo y el espacio con una mirada urgente que avanza por saltos e interrupciones. La perspectiva dialéctica benjaminiana intenta localizar los “no-eventos” y los “no-protagonistas” en el tiempo y la ciudad a fin de que sea posible reescribir la historia. Ésta es la idea que, de algún modo, subyace en esa enorme colección de citas que son los Pasajes. Allí aparece profusamente la idea de “despertar”, como, por ejemplo, un “proceso escalonado que tiene lugar en la vida del individuo así como en la vida de las generaciones”, que permite relacionar la experiencia individual y la colectiva (o generacional) en un proceso que, fundamentalmente, se vincula con la idea de discontinuidad y disrupción que caracteriza la concepción dialéctica benjaminiana. En este sentido, la figura de Baudelaire, en tanto autor revolucionario para Benjamin, parece ayudar a comprender el modo en que el carácter imprevisible se convierte en una estrategia política.