INVESTIGADORES
SERENA Maria Soledad
congresos y reuniones científicas
Título:
Detección de Parvovirus porcino y Circovirus porcino tipo 2 en momias y nacidos muertos en ausencia de falla reproductiva en una granja intensiva
Autor/es:
ASPITIA C; SERENA MS; DIBARBORA M; METZ G,; ALUSTIZA F; BESSONE F; SORIANO PEREZ M; ECHEVERRÍA MG; CAPPUCCIO J
Lugar:
Cordoba
Reunión:
Congreso; IX Congreso de Producción porcina del Mercosur. XIV Congreso Nacional de Producción porcina. XX Jornadas de Actualización porcina.; 2018
Resumen:
INTRODUCCIÓNEl estudio de los agentes virales asociados a fallas reproductivas suele enfocarse a la detección de anticuerpos en suero materno o líquidos fetales, o a la detección del agente en tejidos fetales ante la presencia de un cuadro de fallas reproductivas. Dentro de los virus más frecuentemente asociados a fallas reproductivas a nivel mundial podemos mencionar al virus del síndrome respiratorio y reproductivo porcino (PRRSv), virus de la enfermedad de Aujeszky (ADV), parvovirus porcino (PPV) y circovirus porcino tipo 2 (PCV2). El primero de ellos es exótico en nuestro país y el segundo se encuentra bajo un programa de erradicación, en el cual, la mayoría de las granjas intensivas son negativas.El objetivo de este trabajo es evaluar la presencia de ADN viral (PPV y PCV2) en fetos nacidos muertos en hembras sin falla reproductiva en una granja intensiva porcina.MATERIAL Y MÉTODOSUna granja intensiva de 1000 madres, negativa a ADV, aceptó participar del estudio. La granja produce sus propias cachorras, realiza la adaptación y preparación de las mismas en corrales y luego del 1º o 2º celo (> 200 días) se pasan a jaulas individuales. El plan de vacunación es PPV y PCV2 a cachorras (>180 días) y PPV (10 días posparto). Se recolectaron momias o nacidos muertos de hembras que tuvieron un parto normal. Las mismas se almacenaron a -20ºC hasta su procesamiento. En el laboratorio, se realizó la necropsia de cada uno de los fetos, se determinó la edad y se los categorizó en momias (M), nacidos muertos tipo I (NM I) o nacidos muertos tipo II (MN II) (1). Se tomaron muestras de tonsilas, corazón, pulmón, hígado y riñón. Posteriormente se realizó la extracción de ADN usando kits comerciales desde el homogenato de las mismas y luego se realizó la reacción de PCR (2, 3). Se evaluó la asociación entre la detección de los agentes y el tipo de feto mediante la prueba de Χ2.RESULTADOSSe procesaron 131 fetos de 74 hembras. La edad media de los fetos evaluados fue de 92,1 días (rango=48-117). 22/74 de las hembras (29,7%) y 23/131 (17,6%) de los fetos fueron positivos a, al menos, un agente. La frecuencia de detección de cada uno de los agentes, según el tipo de feto evaluado se presenta en la tabla 1.DISCUSIÓNGeneralmente el estudio de los agentes asociados a fallas reproductivas se realiza ante la aparición de las mismas. Evaluar la presencia de los agentes dentro de una granja en ausencia de abortos o repeticiones de celo nos permite evaluar el riesgo de aparición de cuadro clínico. En Argentina, además, no es frecuente el uso de técnicas de PCR para evaluar agentes causales de falla reproductiva y por lo tanto no hay mucha información sobre la dinámica de los agentes que pueden estar circulando de forma subclínica.A pesar de que los animales evaluados pertenecían a camadas que tuvieron partos normales, se detectó ADN viral en los tejidos de un bajo porcentaje de animales (PPV 8%, PCV2 4,6%; doble positivos 4,6%). Si bien el número de animales positivos es bajo y el tipo de muestreo aplicado puede sesgar la representatividad de las muestras, no se encontraron diferencias estadísticas entre la detección de PPV, PCV2 o doble detección y la clasificación en M, NM I y NM II. Es escasa la información a nivel mundial sobre la significancia de la detección de ambos agentes, en tejidos fetales, en ausencia de falla reproductiva. Los resultados de este estudio sugieren que, las vacunas utilizadas no previenen la infección, y que además tampoco evitarían el paso de los virus a través de la placenta. Esto repercutirá en un incremento, aunque sea leve, en el número de nacidos muertos y consecuentemente en la productividad de la granja. Los hallazgos aquí reportados alertan sobre la necesidad de reducir la circulación de agentes patógenos mediante medidas complementarias a la vacunación, como ser: higiene y desinfección estrictos, correcta adaptación de las cachorras, uso de feed-back, etc. Con lo cual se reducirá a su vez el riesgo de aparición de cuadro clínico. Los presentes resultados también remarcan la necesidad de realizar estudios de vigilancia y circulación de agentes mediante técnicas de alta sensibilidad y especificidad, como lo es la PCR.