BECAS
HLEBOVICH Ludmila
congresos y reuniones científicas
Título:
Percepción y montaje. Un terreno compartido por Walter Benjamin y Pina Bausch
Autor/es:
LUDMILA HLEBOVICH
Reunión:
Congreso; Congreso Internacional de Filosofía de la Danza; 2017
Resumen:
Para el presente trabajo tomamos como punto de inicio la perspectiva de Marie Bardet respecto de la potencialidad que contiene la vinculación entre filosofía y danza para elucidar ciertos problemas compartidos por ambas. No se trata aquí de que la filosofía tenga por objeto de estudio a la danza y se posicione en el lugar de espectadora objetivante, es decir, no se busca verificar una teoría filosófica aplicándola como un sistema cerrado a una práctica, la danza, ni el intento de lo contrario. Desde este marco, proponemos explorar el problema de la percepción y de la práctica del montaje como asuntos que vinculan a la filosofía de Walter Benjamin y el Tanztheater de Pina Bausch. Según hipotetizamos, la práctica del montaje se alza como terreno de elaboración de la crisis de la percepción inscribiendo a ambos en la ruptura epistemológica propia del siglo XX. En este sentido, en el Preámbulo a Poética de la danza contemporánea Laurence Louppe observa que la capacidad de la danza para expresar facetas invisibles del presente se debe, por un lado, al trabajo de esta disciplina en vistas a suscitar la aparición del imaginario del cuerpo y darle legibilidad y, por otro, a un tipo particular de pensamiento que no es parasitario de otro saber. De este modo, la danza contemporánea se constituye como una de las figuras que, a la par de los estudios políticos y de las ciencias humanas, se posiciona críticamente frente a la epistemología moderna. Su aporte consiste en que ?el cuerpo, y sobre todo el cuerpo en movimiento, sea a la vez el sujeto, el objeto y la herramienta de su propio saber. A partir de lo cual pueda surgir otra percepción, otra conciencia del mundo? (Louppe, 2011: 17). Por su parte, la radicalidad de la denuncia benjaminiana a la noción de progreso moderno, especialmente, de las concepciones teleológicas de la historia, se plasma en gran medida en su propuesta metodológica del montaje. Aquí, el cuerpo (Leib) conforma ?el instrumento más fiable para la adivinación?, según indica Benjamin en Calle de dirección única. A su vez y de modo más general, notamos que dicho método constituye una de las respuestas que desde distintos ámbitos se encuentran frente a las nuevas condiciones para la percepción y la experiencia que se despliegan desde el siglo pasado. En este sentido, se suele plantear recurrentemente que el Tanztheater de Bausch es un teatro de imágenes que se conjugan como puzzle, montaje o collage poniendo en jaque la percepción estandarizada (Cfr. Baxmann, 2008). Notamos así que en la filosofía benjaminiana como en el teatro-danza de Bausch emerge la práctica del montaje debido a un doble movimiento de crítica de la linealidad y el progreso de la historia así como de reivindicación de la discontinuidad, lo fragmentario y la interrupción, hallando en el cuerpo una clave para trastocar el estado crítico de la percepción que sustenta a la experiencia.