INVESTIGADORES
AZCOITIA Alfredo
congresos y reuniones científicas
Título:
La Patagonia Norte en perspectiva binacional: construyendo territorialidad desde la interdisciplina (1958-1979). Repensando la experiencia local, regional, nacional y transnacional en América Latina. Historia de identidades, imaginarios y representaciones
Autor/es:
MARIA ANDREA NICOLETTI; ALFREDO, AZCOITIA; LAILA, VEBJBERG; BARELLI, ANA INÉS
Lugar:
Milán
Reunión:
Workshop; Repensando la experiencia local, regional, nacional y transnacional en América Latina. Historia de identidades, imaginarios y representaciones sobre y desde la Patagonia argentina (s. XIX-XX/XXI); 2016
Resumen:
Dentro del amplio espacio patagónico, la porción norte del territorio posee características singulares como primer espacio conquistado por las armas del Estado (1879-1884) y por su heterogénea composición subregional. Si bien esta diversidad se advierte en un primer golpe de vista en el amplio espacio rionegrino, de la costa a la cordillera pasando por la meseta central, el triángulo neuquino de montañas y ríos impetuosos mete su cuña con el productivo Alto Valle reorientándose en el siglo XX al Atlántico, sin dejar detrás la dinámica transcordillerana de su común historia con la Araucanía chilena. A groso modo, Río Negro puede pensarse como un territorio con fuertes tensiones subregionales internas mientras que en Neuquén, esta tensión se advierte en su búsqueda de integración al espacio nacional desde su singularidad y la perdurabilidad de la idea de aislamiento, de triángulo y de isla que marcaron fuertemente su construcción socio histórica.A lo largo de la historia en Río Negro como puerta y corredor de entrada a la región, emerge la evidencia de la variedad y la excentricidad de su espacio en el que se manifiestan regiones con economías y organizaciones sociales tan diversas: Los Valles, la Zona Andina, la Meseta y la Costa. En Neuquén la montaña compartida con Chile resulta más abierta y porosa que en Mendoza y sus centenares de pasos y boquetes nos habla de una interrelación cordillerana fecunda y continua. En el otro extremo, la costa atlántica rionegrina por su corte y accidentada geografía presenta puertos y abrigos naturales propicios para el comercio exterior y la comunicación, pero fundamentalmente para el espacio neuquino, son el punto de desembocadura de los grandes ríos que surcan su geografía y la escalonada meseta rionegrina. El Colorado, el Negro, el Neuquén y el Limay, fueron asiento de las primeras poblaciones que tras la conquista se transformaron en urbes, sus valles en espacios de desarrollo productivo y su fuerza en fuentes de energía con más provecho para la Nación que para las nacientes provincias norpatagónicas, Río Negro y Neuquén, que comparten procesos comunes en estrecha relación con el espacio allende la cordillera.Caracterizado el espacio, proponemos un recorte temporal que nos permita dar cuenta de las principales transformaciones del territorio desde el momento clave de provincialización y hasta la dictadura del Proceso de Reorganización Nacional (1958-1976). En este recorte espacial y temporal norpatagónico, Río Negro centró su repoblamiento en distintos focos y modalidades, en los valles de los ríos al norte, el área andina al oeste, la meseta en el centro-sur y la costa atlántica al este, que pronto constituyeron realidades difíciles de soldar en una identidad común. En Neuquén, siguieron una dinámica triangular desde los lados hacia el interior y sus localidades cordilleranas fueron las de mayor intercambio con la Araucanía chilena.