INVESTIGADORES
VILLULLA Juan Manuel
congresos y reuniones científicas
Título:
La resistencia desorganizada. Conflictos de baja densidad de los obreros agrícolas pampeanos frente al orden laboral del agronegocio, 1976-1983
Autor/es:
JUAN MANUEL VILLULLA
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Congreso; XVI Jornadas Interescuelas de Historia; 2017
Institución organizadora:
Departamento de Historia de la UNMdP
Resumen:
La historia de este artículo, entonces, es la historia del procesamiento político de una reestructuración regresiva de los vínculos capital-trabajo en un área clave de la sociedad argentina, en el marco de una ofensiva más general de las clases dominantes del país frente a los trabajadores. Por razones de espacio, en esta oportunidad nos limitamos a la primera fase de este proceso, entre 1976 y 1983, durante la última dictadura. Sostenemos que la conflictividad laboral en la agricultura pampeana luego de los años ?70 fue de baja densidad. Es decir, no comportó choques resonantes a escala social. Pero eso no quiere decir que las condiciones laborales o los niveles de empleo se hayan resuelto sólo a través de los mecanismos aparentemente neutros del mercado laboral o del desarrollo tecnológico. Estos se combinaron siempre con un procesamiento político entre los grupos sociales involucrados. Y en efecto, el período abordado en este artículo exhibe precisamente distintas modalidades de contestación obrera y estrategias patronales deliberadas alrededor de aquello, que hasta ahora prácticamente no habían sido tenidas en cuenta para conceptualizar cómo fue que se crearon las condiciones sociales para la emergencia de los agronegocios en la pampa, ni por qué se trata de una de las actividades con los salarios más bajos del país. Este enfoque nos permitió ubicar que: 1) las condiciones laborales de los operarios de maquinaria agrícola en el epicentro de los agronegocios de la Argentina ?signadas por altos niveles de explotación económica, tercerización, precariedad, jornadas prolongadas y alta exposición de los cuerpos al riesgo físico-, se dirimieron en el terreno de la lucha política entre los grupos sociales involucrados, y no como fruto espontáneo o inevitable de una relación entre oferta y demanda laboral, ni de la aplicación de una u otra tecnología; 2) que esa lucha se desarrolló como parte indisoluble de una nueva etapa del capitalismo agrario pampeano, entre la última dictadura y principios del siglo XXI, definida no sólo por una reestructuración del capital agrario ?mayor presencia de grandes fondos de inversión locales y extranjeros; modalidades flexibles de organización y financiamiento; modernización técnica y administrativa; concentración de la producción, etc.-, sino también por una redefinición de las relaciones entre el capital y el trabajo de contenido regresivo, como mencionábamos antes; 3) que buena parte de los obreros rurales opusieron resistencias a esta reestructuración regresiva de las relaciones capital-trabajo, expresadas en dos planos usualmente disociados: a) el de la lucha sindical y política organizada ?protagonizada por gremialistas, representantes de las corporaciones patronales y funcionarios del Estado- ; y b) el de las formas de contestación más capilares y desarticuladas en los lugares de trabajo, individuales o colectivas, que representaron distintos niveles de consciencia respecto a los intereses contrapuestos que los oponían a sus empleadores en este contexto.