INVESTIGADORES
MIE fabian Gustavo
congresos y reuniones científicas
Título:
Definición nominal y experiencia en la teoría de la ciencia de Aristóteles
Autor/es:
FABIAN MIE
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Jornada; Imágenes y representaciones en la antigüedad grecolatina. Actas de las I Jornadas Internacionales de Estudios clásicos Ordia prima; 2008
Institución organizadora:
Ordia Prima. Universidad Nacional de Córdoba
Resumen:
El mero conocimiento de la existencia de algo es asociado por Aristóteles al conocimiento que es, de alguna manera, primero y que podemos alcanzar del significado del nombre a través del cual hacemos referencia a un objeto (APo. II 7, 92b4-11). Se destaca frecuentemente que Aristóteles acepta la precedencia del conocimiento de la existencia ante el de la esencia (tì esti, tò tí ên eînai (93a19-20), pero para entender dicha tesis tenemos que tomar en consideración el paralelo entre, por un lado, el hecho de que podemos conocer la existencia de algo, aunque no ya con ello acceder a su esencia, y, por otro, la misma relación entre conocer la sola definición del nombre de una cosa, o sea, el enunciado del qué es, que expresa el significado del nombre (lógos toû tí semaínei tò ónoma) y al cual Aristóteles califica como “nominal” (onomatódes) (10, 93b29-30)[1], y conocer lo que la cosa realmente es. Aristóteles acepta que alguien puede tomar conocimiento de algo por vía meramente nominal, o sea, conociendo el significado del nombre, sin que ello presuponga tener un conocimiento de la estructura real de la cosa. Éstas son dos tareas diferentes, como lo son conocer la esencia o meramente la existencia de una cosa (92b9-11). En todos aquellos casos donde sabemos usar bien un término, conocemos su significado y podemos saber a través de su uso que hay algo en el mundo que ese nombre denota, sin que con ello sea necesario presuponer también que conocemos la esencia de la cosa. Esto último se correspondería con el tipo de conocimiento que entraña para Aristóteles dominar items no ya meramente lingüísticos, sino reales, a través de una definición real. [1] APo. II 7, 92b27-28: “la definición es un enunciado que significa lo mismo que el nombre”. Esto se da en el caso de que no sea posible de ninguna manera mostrar el qué es, es decir, alcanzar la definición real.