IIEP   24411
INSTITUTO INTERDISCIPLINARIO DE ECONOMIA POLITICA DE BUENOS AIRES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Cooperación Sur-Sur como Estrategia de Desarrollo: El caso de América Latina y África
Autor/es:
MARIELA BEMBI; JESICA DE ANGELIS; ANDREA MOLINARI
Lugar:
Moreno, Buenos Aires
Reunión:
Congreso; 2° Congreso de Economía Política Internacional; 2016
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Moreno
Resumen:
Luego de la última crisis económica y financiera internacional, los países emergentes y en vías de desarrollo demostraron ser el principal motor del crecimiento económico global, desplazando a las economías más industrializadas. Este escenario abre oportunidades para nuevas formas de interacción como la llamada ?cooperación sur-sur?, la cual podría servir como una herramienta clave para fortalecer la integración entre los PED, su inserción en la economía mundial y los vínculos interregionales.En este sentido, en los últimos años este tipo de cooperación ha atraído una gran atención, tanto en las agendas de política nacional como en el mundo académico. En este trabajo, se entiende el concepto de "cooperación sur-sur" en términos amplios. Una de las definiciones más amplias es la de la Oficina de las Naciones Unidas para la Cooperación Sur-Sur (UNSSC), que lo define como "( ... ) un amplio marco para la colaboración entre los países del Sur en las esferas política, económica, social, cultural, ambiental y técnica (...) que pueden tener lugar sobre una base bilateral, regional, subregional o interregional para compartir conocimientos, capacidades, experiencia y recursos con el fin de alcanzar sus objetivos de desarrollo a través de esfuerzos concertados. Los acontecimientos recientes en la cooperación sur-sur han tomado la forma de un aumento del volumen del comercio o los flujos de inversión extranjera directa sur-sur, la integración regional, la transferencia de tecnología, el intercambio de soluciones y expertos".La literatura se ha ocupado predominantemente de explorar los vínculos intrarregionales, entre AL y Asia (Oviedo, 2005; Sevares, 2007; Kwak, 2013), o aquellos entre África y Asia (Sanfilippo, 2010; Mutambara, 2013; Pigato y Tang, 2015), sin enfocarse demasiado en la relación entre América Latina (AL) y África (Brun, 2009; SELA, 2011). Esto se debe a que, generalmente, estas dos regiones enfocan sus estrategias de cooperación sur-sur con países dentro de sus propias regiones o con países asiáticos (Lechini, 2009 y 2014; Ayllón y Surasky, 2010; Ojeda, 2010).El objetivo de esta investigación es analizar la cooperación sur-sur que existe entre algunos países de América Latina y África, así como sus principales potencialidades. Esto es importante debido a las coincidencias que tienen ambas regiones, sobre todo en cuanto a sus desafíos de desarrollo (estructura productiva, dispersión geográfica, etc.). Este objetivo está motivado en la idea de que la integración sur-sur puede ayudar a reforzar una mejor inserción global de los países en vías de desarrollo, lo cual, a su vez, tendrá un impacto positivo sobre la calidad de su crecimiento, haciéndolo más equitativo e inclusivo. En este sentido, una participación de estas regiones en el contexto internacional más afín al desarrollo puede estar vinculada con tres tipos de estrategias. En primer lugar, es posible analizar la defensa conjunta de intereses comunes en el ámbito multilateral para lograr una mejor posición negociadora (e.g. en ámbitos como las rondas de la Organización Mundial de Comercio, OMC). En segundo lugar, este vínculo se manifiesta en el fortalecimiento de la cooperación a nivel técnico en aquellas áreas donde las regiones cuentan con expertise (e.g. cooperación técnica agrícola, minería o recursos naturales en general). Y, finalmente, se puede pensar en una estrategia centrada en esquemas de complementación productiva interregional que permitan a los países insertarse en eslabones de mayor valor agregado dentro de las cadenas globales y/o regionales de valor (e.g. mediante una mayor especialización productiva y comercial o upgrading).En este trabajo, nos enfocamos en la tercera estrategia, es decir, la inserción en cadenas globales de valor para generar un mayor valor agregado en ambas regiones. Para ello, primero examinamos los flujos interregionales de comercio e inversión extranjera directa (IED, actualizando el análisis de Molinari, Strauss, De Angelis, 2014). Si bien altos flujos comerciales o de inversión no necesariamente reflejan un alto nivel de cooperación, comenzamos con este tipo de análisis porque los mismos podrían constituir la base para la elaboración e implementación de políticas públicas que sirvan para construir plataformas de cooperación entre esos países. En el caso, por ejemplo, de la cooperación tecnológica es esencial involucrar a varios actores clave en cada plataforma productiva, así como unir los intereses nacionales de los países en foros internacionales a aquellos del resto del mundo, etc.Las dos primeras secciones de este trabajo resumen el marco teórico de la cooperación sur-sur y los principales trabajos que exploran la relación entre África y América Latina y el marco general de cooperación existente). Las dos secciones siguientes analizan las relaciones entre AL y África desde dos ángulos diferentes: flujos bilaterales de comercio e IED (i.e. intercontinentales) durante los últimos 15 años. Del análisis de los datos disponibles se desprende que, si bien no existe una relación significativa entre estas regiones, tanto el comercio como la IED han crecido desde principios del nuevo siglo, lo cual da ciertos indicios de las interesantes potencialidades para mejorar los flujos comerciales y las inversiones bilaterales interregionales entre AL y los países africanos. Además, el comercio interregional está muy concentrado, tanto en unos pocos sectores como países. Por su parte, el comercio inter-regional sigue patrones similares a las tradicionales relaciones Norte-Sur, sobre la base de las ventajas comparativas de los países (especialización en productos primarios). En particular, los flujos comerciales muestran cierto dinamismo en alimentos, bebidas, carbón, petróleo y gas natural, sectores que también parecen mostrar algunas potencialidades en los flujos de IED. Esta evidencia, así como los pasos que han dado algunas empresas privadas (en muchos casos adelantándose al Estado), sugiere que América Latina y África pueden explotar aún más sus complementariedades cruzadas.Luego de este primer análisis de flujos económicos, se analizan en mayor profundidad algunas de las cadenas productivas para las cuales se encontraron (en el análisis más agregado) potencialidades para reforzar la plataforma de cooperación interregional: alimentos de mayor valor agregado (o con potencial para agregar valor), medicamentos y automotriz.Por último, es importante aclarar que se pretende que este trabajo sea un puntapié inicial para, a partir de los resultados encontrados, derivar recomendaciones preliminares de políticas públicas tendientes a afianzar los lazos de cooperación entre países de América Latina y África para alcanzar un desarrollo inclusivo.ReferenciasAyllón, B., & Surasky, J. (2010). La cooperación Sur-Sur en Latinoamérica: utopía y realidad. Catarata. Brun, E. (2009). Las relaciones entre América Latina y África: ¿potenciales o ilusorias? Documento de Proyecto, CEPAL.Kwak, J. S. (2013). La creciente importancia de la Cooperación Sur-Sur en las relaciones económicas entre Asia y ALC. Revista Integración y Comercio (Integration and Trade Journal), 36(17), pp, 43-58.Lechini, G. (2009). La Cooperación Sur?Sur y la búsqueda de autonomía en América Latina ¿Mito o realidad? Revista Relaciones Internacionales, Universidad Autónoma de Madrid, nº 12, octubre.Lechini, G. (2014). La cooperación sur-sur en las agendas externas de Argentina y Brasil. Revista Estudios, 35-47.Molinari, A., I. Strauss & J. De Angelis (2014). South-South cooperation between Latin America and Africa. Analysis with trade and FDI indicators. FLACSO-ISA Joint International Conference, Buenos Aires, julio.Mutambara, T. E. (2013). Africa-Asia trade versus Africa?s trade with the North: Trends and trajectories. African Review of Economics and Finance, 4(2), 273-299. Ojeda, T. (2010). La cooperación sur-sur y la regionalización en América Latina: el despertar de un gigante dormido. Relaciones Internacionales, (15).Oviedo, E. D. (2005). Crisis del Multilateralismo y Auge de la diplomacia bilateral en la relación Mercosur-China.Pigato, M., y Tang, W. (2015). China and Africa: Expanding Economic Ties in an Evolving Global Context. World Bank Group Working Paper, Washington DC.Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (2011). Las Relaciones de América Latina y el Caribe con África: Situación actual y áreas de oportunidad. Secretaría Permanente del SELA Caracas, Venezuela: junio, SP/Di No. 07-11. Sanfilippo, M. (2010). Chinese FDI to Africa: What Is the Nexus with Foreign Economic Cooperation? African Development Review, 22(s1), 599-614.Sevares, J. (2007). ¿Cooperación Sur-Sur o dependencia a la vieja usanza? América Latina en el comercio internacional. Nueva sociedad Nº 207, pp. 11-22.