INVESTIGADORES
NUÑEZ Pedro Fernando
congresos y reuniones científicas
Título:
Las políticas de participación y convivencia escolar en la Argentina: tensiones entre la promoción de derechos y la prevención de la violencia
Autor/es:
PEDRO NUÑEZ
Reunión:
Congreso; Congreso LASA 2016; 2016
Resumen:
La Argentina, al igual que ocurre en otros países deAmérica Latina, atravesó desde la década del 2000 una serie de reformas queimplicaron el desarrollo de nuevas políticas de juventud y el fomento de laparticipación política. A la vez, este incremento se dio en paralelo con elincremento del sentimiento de inseguridad (Kessler, 2009) que, a la par de otroshechos, contribuyó al proceso de criminalización de los jóvenes, en particularvarones, de sectores populares. De esta forma, así como estos años la juventudse transformó en una causa pública (Vázquez 2012) en paralelo cobró preeminanciaun conjunto de representaciones que no sólo niegan sus prácticas sino queenfatizan en la negatividad de las juventudes (Chaves, 2010). La escuelasecundaria fue uno de los escenarios donde ambas tendencias se manifestaron conmayor ambigüedad.  Eneste nuevo escenario social la escuela secundaria concentra numerosas demandas,muchas veces disímiles, que van desde la necesidad de recuperar la autoridaddocente y prevenir la violencia escolar hasta las tradicionales de formar parael trabajo y educar en la ciudadanía. La convivencia escolar, a veces pensadacomo manera de abordar la conflictividad, en muchas ocasiones como forma deprevenir el surgimiento de la violencia, se convirtió en una cuestiónsocialmente problematizada, central para las políticas educativas orientadas a modificar elmodo en el que se concebíala ?disciplina?. Eneste trabajo exploramos la forma que adquieren los procesos de convivenciaescolar en la trama cotidiana de las escuelas. Nos interesa prestar atención atres aspectos: la presencia y regulación de instancias de participación de losestudiantes, la percepción de situaciones injustas y la construcción dedemandas estudiantiles antes hechos considerados injustos. Entendemos que el estudio de las características que asumen dichas políticaspermite examinar en las tensiones entre la pretensión de promoción de derechosy el deseo de prevenir los conflictos y la violencia, en particular de aquellossujetos definidos a priori como sectores en riesgo o vulnerables,a pesar de la retórica de derechos presente en sus fundamentos. En este sentidopueden ser leídas como formas de velar por una juventud descarriada, cuyaspautas de comportamiento se consideran alejadas de las convencionales (Matzda,2014).Tal como sostienen investigaciones en otros países, por lo general las posturasconservadoras o más progresistas sobre la disciplina escolar perdieron de vistaque su grado de eficacia no implica una variación en la rigurosidad sino delgrado en que los estudiantes internalizan las reglas como imparciales y justas(Arum, 2003). Nos interesa dar cuenta de la manera en que la producciónde distintos espacios educativos, que denominaremos estilos institucionales(Litichever, 2010) establece modos correctos e incorrectos de comportamiento,pero también regulan las actitudes y tratos hacia docentes y compañeros asícomo instituye las formas de participación política legítimas y otrassancionables y, de esta forma, conllevan percepciones de la justicia diferentes. El estudio es parte de una investigación másamplia que incluye un corpus documental conformado por doscientos setentaencuestas aplicadas a estudiantes  del anteúltimoaño del secundario (cuarto o quinto año de acuerdo a la jurisdicción) en seis escuelas secundarias (cuatro establecimientos de la Provincia deBuenos Aires, tres instituciones en la Ciudad de Buenos Aires y dos en Rosario)y entrevistas con estudiantes, docentes y directivos así como observaciones demarchas, reclamos y acciones protagonizadas por las y los jóvenes realizadasdurante fines del año 2014 y comienzos de 2015.Los casos fueron seleccionados por tratarse de escuelas singulares, es decirque sabiendo de antemano sus tradiciones divergentes así como el tipo depropuesta y de la comunidad conformada, elegimos instituciones cuyo estudioenriquece el análisis y las posibilidad de comparar qué ocurre en espaciosdistintos (McLeod y Yates, 2006). Así las escuelas seleccionadaspara el trabajo de campo difieren en la composición de su matrícula,tradiciones, perfil de los docentes, modalidad y características de supropuesta, por lo que la intención no es establecer una comparación entre ellassino poder generar reflexiones más amplias a partir del estudio de dichosmodelos