INVESTIGADORES
ROMAGNOLI Venettia
congresos y reuniones científicas
Título:
Arte Urbano en la Plaza 25 de Mayo de 1810, Resistencia, Chaco, Argentina
Autor/es:
BENNATO, ANIBAL; BERNARDI, MARCELA,; ROIBÓN, MARÍA JOSÉ; ROMAGNOLI, VENETTIA
Lugar:
Resistencia, Chaco
Reunión:
Jornada; Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004 de la Universidad Nacional del Nordeste,; 2004
Institución organizadora:
Secretaría General de Ciencia y Técnica. Universidad Nacional del Nordeste
Resumen:
Este trabajo se enmarca en el modulo N° 1:Paisaje, Cultura y Sociedad de la Maestría en Gestión del Ambiente, el Paisaje y el Patrimonio MaGAPP, que se dicta en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional del Nordeste. En cuanto al tratamiento de los espacios verdes públicos, y específicamente de las plazas se trata más que de un tema, de un campo temático que viene siendo abordado por décadas tanto a nivel nacional como internacional. Dentro de la bibliografía consultada fue de gran aporte para el desarrollo de este trabajo, los lineamientos teóricos elaborados por la Dra. Sonia Berjman, en sus diversas publicaciones, y específicamente a nivel local, las investigaciones de la Dra. Mariana Giordano sobre la historia y los usos de Plaza 25 de Mayo y del Sr. Julián Vallejos en cuanto al valor documental e histórico de la información reunida en su libro. Los antecedentes encontrados, si bien contribuyeron a la elaboración del presente trabajo, no abordaron el tema desde la perspectiva que se propone, lo cual significó la elaboración propia por parte de este equipo de trabajo, de nuevas herramientas de observación y análisis de la información, resignificando la Plaza 25 de Mayo, a partir de la valorización del arte urbano. A nivel teórico las plazas han tenido a través del tiempo diferentes significaciones en la dinámica urbana, pero siempre ligadas a los paradigmas y usos sociales vigentes en un tiempo y un espacio determinado. La configuración de Plaza 25 de Mayo de 1810 respondió a una etapa de transición entre dos modelos, el español y la concepción progresista europea del siglo XIX, lo que determinó una materialización del espacio en donde se superponen rasgos de ambas teorías. Fue concebida entonces como pulmón de la ciudad, casi un parque, desde su urbanización fue convirtiéndose en el centro de emplazamientos de objetos de ornamentación, monumentos y árboles simbólicos, consolidándose como espacio de encuentros, consagración, monumentalización, de mostrarse y ser reconocido. Posteriormente la ciudad creció y si bien no la plaza no perdió su centralidad, se vació de sus funciones primigenias y perdió significado. Sin embargo, en la última década la acción de reactivarla como centro cultural público, es decir abierto a toda la comunidad, sobre todo desde las bienales de esculturas, ha resignificado este espacio para toda la comunidad de Resistencia. EL arte público ha actuado así como un factor de transformación de la plaza en el tiempo y ha generado en la última década, la posibilidad recuperarla como espacio urbano público. El arte urbano como tal tiene entonces más allá de un compromiso estético un compromiso social, dado que brinda la posibilidad de construir un orden donde el espacio comunitario recupera su protagonismo, donde la calle es un conector entre lo público y lo privado y donde el espacio público es el condensador de la vida social, un elemento de encuentro estructuralmente urbano.