?La sociedad" como irrealidad

CARLOS BELVEDERE

Los Polvorines

Jornada; III Jornadas Posthegelianas 2015. ?La filosofía ante las contradicciones sociales y el malestar del individuo?; 2015

Instituto de Ciencias, Universidad Nacional de General Sarmiento

Desde una perspectiva henriana, vale decir que el modo de ser de ?la sociedad? es el de la irrealidad. ¿Significa acaso que ?la sociedad? no existe? Nos proponemos reflexionar sobre este interrogante, aportando elementos para una ontología social material. No es que hayamos de explorar los presupuestos del ?materialismo? sino que buscaremos comprender el modo de ser de lo social a partir de la fenomenología material de Michel Henry.Desde este punto de vista, los rasgos que habitualmente se le asignan al hecho social ?que fueran descriptos por primera vez y de manera definitiva por Emile Durkheim- son, curiosamente, los mismos que caracterizan el modo de ser de la irrealidad: la exterioridad y la objetividad. A su vez, ambas son relacionadas por el mismo Durkheim así como por la pléyade de sus continuadores (entre los cuales apenas unos pocos son conscientes de serlo) e incluso por la mayoría de sus detractores, con el concepto de representación. De modo que la representación no nos aleja de la perspectiva durkheimiana sino que nos hunde más profundamente en ella.¿Qué consecuencias tiene esto para la ontología social? De acuerdo con la fenomenología material, el rasgo distintivo de la representación es el de la ?indigencia ontológica?. También le son propios su ser secundario y derivado. Además, la representación es redundante pues vuelve a poner, de un modo impropio, lo que ya estaba dado en su realidad originaria. Por último, ¿cómo pensar la relación individuo-sociedad desde esta ontología? Creemos que la perspectiva herniana muestra las carencias propias de este tipo de contradicción pues deja fuera de cuadro la realidad originaria ?es decir, afectiva, material, real- de la comunidad; a menos que se piense la comunidad en un sentido tan inesencial, contingente y vacuo como lo hacen las representaciones de la sociedad recién mencionadas. ¿No será mejor, acaso, pivotar sobre el eje comunidad ? sociedad, en vez de individuo ? sociedad? ¿No introduce acaso este cotejo la misma contradicción que busca superar? Es nuestra esperanza que el recurso a la fenomenología material contribuya a esclarecer algunos aspectos de esta compleja problemática.