INVESTIGADORES
GOLDSTEIN RAIJ jorge
congresos y reuniones científicas
Título:
La toxina Shiga 2 (Stx2) producida por Escherichia coli enterohemorrágico (STEC) se localizó en el cerebro de rata luego de su administración y alteró la estructura neuronal
Autor/es:
V. PISTONE CREYDT; C.F. LOIDL; C. IBARRA; J. GOLDSTEIN
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Congreso; SOCIEDAD ARGENTINA DE INVESTIGACIÓN CLÍNICA; 2005
Institución organizadora:
SOCIEDAD ARGENTINA DE INVESTIGACIÓN CLÍNICA
Resumen:
La Stx2 producida por STEC es la causa principal de colitis hemorrágica en humanos que puede derivar en Síndrome Urémico Hemolítico (SUH). El 6% de los casos de SUH producen lesiones permanentes del Sistema Nervioso Central (SNC) con riesgo de muerte. El objetivo de este trabajo fue el estudio de la acción tóxica de Stx2 en el SNC de ratas machos SD inyectadas via i.p. con 3ml de sobrenadante de E. coli recombinante que contiene Stx2 (80ng/ml). Luego de 48hs de tratamiento se observó diarrea, pérdida de peso, oliguria, debilidad y muerte. Los animales fueron seguidamente perfundidos intracardíacamente con paraformaldehído 4%, se extrajo el encéfalo y Stx2 se inmunolocalizó en células parenquimatosas cercanas a vasos sanguíneos situadas en el núcleo periacueductal gris. En la misma zona se observaron neuronas hipertrofiadas muy intensamente teñidas con Nissl, núcleo desplazado, prolongación festoneada y neuronas amorfas. Estos resultados sugieren que la toxina logra atravesar la barrera hematoencefálica y altera la estructura neuronal. La lesión de los animales tratados puede deberse a la acción directa de Stx2 en neuronas del encéfalo la cual puede estar potenciada por factores del sobrenadante bacteriano. A continuación se purificó Stx2 por cromatografía de afinidad, se cuantificó por geles de SDS-PAGE y Western blot, se midió su actividad citotóxica en células renales en cultivo (10(8)CD50/ml) y se usó en microinfusión intracerebroventricular (MI-ICV). Se administró 6µl de Stx2 purificada (1ng/µl) en cerebro de rata vía MI-ICV pudiéndose observar alteraciones en la ultraestructura neuronal. El modelo de MI-ICV permite estudiar la fisiopatología de la intoxicación cerebral por toxina Shiga para conocer sus consecuencias en la evolución de la enfermedad.