INVESTIGADORES
VIGLIANO Carlos
congresos y reuniones científicas
Título:
SINDROMES LINFOPROLIFERATIVOS POSTRASPLANTE. EXPERIENCIA EN UN CENTRO
Autor/es:
COLORIO C; ROSSI A; TABARES M; PUENTE D; PERADEJORDI LASTRA M; RUF A; VIGLIANO C; POMBO G
Lugar:
Salta
Reunión:
Congreso; Congreso Argentino de Hematología; 2007
Institución organizadora:
Sociedad Argentina de Hematología
Resumen:
Los síndromes linfoproliferativos postrasplante (PTLD) constituyen una complicación severa que se observa en el 1 a 20% de los pacientes (p) sometidos a trasplante de órganos sólidos. Su manejo muchas veces resulta dificultoso y no hay consenso acerca de los diferentes esquemas terapéuticos a utilizar. Los objetivos fueron: 1) Evaluar el comportamiento clínico de los p con diagnóstico de PTLD; 2) Determinar características anatomopatológicas; 3) Establecer pautas de tratamiento y 4) Determinar la prevalencia de PTLD en p adultos trasplantados con órgano sólido en nuestra Institución. Se analizaron retrospectivamente las historias clínicas de todos los p adultos con diagnóstico de PTLD desde marzo/94 hasta marzo/07 estudiados en nuestra Institución. Se diagnosticó PTLD en 16/1164 p trasplantados (1,37 %). La media de edad fue de 45,9  años (rango 18 a 72). 15 p eran de sexo masculino y 1 femenino. El órgano trasplantado fue corazón 9 p, riñón 2 p, pulmón 2 p, cardiopulmonar 1 p e hígado 2p. Presentaron rechazo en los 6 meses previos al diagnóstico del PTLD 5 p (31,3%). La serología pretrasplante fue positiva para EBV en 13/16 p (81%) y para CMV en 11/16 p (69%). En 14/16 p (87.5%) el síndrome linfoproliferativo era de tipo B (CD20+) y en cuatro p el PTLD se presentó en el órgano trasplantado. En 2/16 p hubo infiltración de la médula ósea. La presentación de PTLD tardía (luego de los 12 meses del Tx) ocurrió en el 75% de los casos, en un 56% de los casos con compromiso extranodal. El tratamiento se efectuó mediante reducción de la inmunosupresión (respondiendo favorablemente el 18.8% de los p) y anticuerpos monoclonales anti-CD20. No hubo recaídas, la mortalidad estuvo relacionada principalmente con intercurrencias infecciosas. El 43,8 % de pacientes están vivos y libres de enfermedad.