INVESTIGADORES
LAPRIDA Cecilia
congresos y reuniones científicas
Título:
El registro de la Pequeña Edad de Hielo en lagunas bonaerenses (EN PRENSA)
Autor/es:
LAPRIDA, C. Y ORGEIRA, M.J.
Lugar:
San Salvador de Jujuy
Reunión:
Simposio; Simposio Paleoclima durante el Cenozoico Tardío. 16º Congreso Geológico Argentino. Octubre 2008, S.S. Jujuy.; 2007
Institución organizadora:
Congreso Geologico Argentino
Resumen:
La dependencia del hombre respecto del medio natural ha sido genialmente expresada por el historiador y periodista Will Durant: “La Civilización existe con consentimiento geológico, el que puede ser cancelado sin previo aviso”. Numerosas investigaciones intentan encontrar las claves de ese consentimiento a través del estudio del clima reciente. El Holoceno ha sido un período en el cual han existido una gran cantidad de cambios climáticos de alta frecuencia cuyas causas incluyen interacciones entre los océanos, la atmósfera y la actividad solar. Se conoce como Pequeña Edad de Hielo (LIA) al episodio acontecido entre el siglo 14 y mediados del siglo 19, durante el cual el clima europeo se volvió impredecible, frío y ocasionalmente tormentoso. En ciertas partes de Europa, las observaciones instrumentales la abarcan parcialmente, pero para la región pampeana sólo existen registros desde hace poco más de cien años. Con el objetivo de obtener datos para el período comprendido por la LIA en la llanura pampeana, se analizaron testigos cortos (aprox. 40 cm) de la Laguna de Chascomús y del Monte que, de acuerdo a dataciones AMS, abarcan los últimos 500 años.El sondeo de Chascomús consta de tres secuencias granodecrecientes cuyas bases están representadas por arenas muy finas con matriz limo arcillosa y limos arenosos masivos de color gris oscuro con presencia de carbonatos, que representan momentos de retracción de la laguna. El análisis de parámetros físicos, geoquímicos, biológicos y sedimentológicos ha permitido reconocer un período benigno desde fines del siglo 15 que permitió la colonización europea del área, durante el cual la disponibilidad de agua favoreció el inicio de las actividades agrícolo-ganaderas. Sin embargo, alrededor del 1700 se evidencia una retracción de la laguna que inaugura un período seco que afectó la salinidad y la composición iónica de las aguas de la laguna. Este episodio habría continuado por casi 150 años y se revierte alrededor de 1850, momento a partir del cual los eventos de excesos hídricos comenzaron a dominar el escenario pampeano.Al igual que Chascomús, el sondeo la laguna de Monte se compone de tres secuencias granodecrecientes. Los ostrácodos son muy abundantes, con dominio de especies típicas de aguas con relaciones HCO3-/Ca2+ bajas. La base del testigo arrojó una edad de 456-509 años cal BP. El análisis sedimentológico y físico indica dos ciclos multiseculares de contracción/expansión del lago representados por niveles de arenas y limos arenosos masivos grises e incrementos en la susceptibilidad magnética que pasan a limos masivos grises y limos finos organógenos masivos negros. Si bien el modelo de edades aún no ha podido ser bien establecido, los eventos de Chascomús y Monte podrían ser correlacionables y expresar tendencias multiseculares regionales de la humedad. Evidencias basadas en mamíferos arrojan tendencias secas y áridas para los 440 BP (Tonni et al., 1999), pero algo más benignas para los 300 BP (Pardiñas y Tonni, 2000) lo que indicaría la existencia de oscilaciones semejantes a las aquí observadas. En ambos sondeos, los bancos de arenas finas indican períodos de déficit hídrico, evidenciados por la presencia de foraminíferos de ambientes atalásicos en el sondeo de Monte y por incrementos en los valores de susceptibilidad magnética en Chascomús. El registro de la laguna Mar Chiquita (Piovano et al., 2002) muestra un período extremadamente seco alrededor de 1770 que podría correlacionarse con los períodos secos reconocidos en la secuencia sedimentaria de Chascomús y del Monte. Coincidentemente, los registros históricos (Politis, 1984, Deschamps et al., 2001) indican intensas sequías en la provincia de Buenos Aires durante la segunda parte del siglo 19 que podrían ser las últimas expresiones de la LIA en las pampas y el origen de la señal observada en los sondeos.