Pensando la diferencia

HERRERA MARÍA MARTA

Buenos Aires - San Juan

Congreso; Congreso Latinoamericano de Historia de las Mujeres; 2012

ISHIR-Conicet, IDAES-UNSAM

Si  la verdad no es identificable con una tesis, una representación sino que es el pensamiento en su movimiento, y el movimiento del pensamiento, la propuesta de Francoise Collin , quien en este sentido sigue a Hannah Arendt, radica en una concepción diferente del hacer, una praxis que no tiene garantía, ni finalidad previa. En efecto, la praxis de la diferencia de los sexos pasa a ser un acto transformador donde la diferencia es una différance no determinada a priori. No es un hecho, es un acto de desplazamiento fuera de los lugares, sin que sea asignado el buen lugar. Pero distanciándose de autores como Derrida o Deuleuze, considera que el devenir de ?lo femenino? en la filosofía en la forma de lo no-uno, de la alteridad, de la pasividad invisibiliza peligrosamente la condición de las mujeres secularmente marginadas bajo esa categoría. Collin reniega que lo femenino sea una categoría liberadora cuando por siempre ha sido la experiencia forzada de una mitad de la humanidad identificada como ?las mujeres?. Así pues, la indiferencia  o el borramiento de las fronteras de los sexos parece una petición de principios, una proyección de un deseo o una nueva y cínica tentación metafísica.