IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
De la Naturaleza como el conjunto de los fenómenos a la Naturaleza como un polo de lo Absoluto en el tránsito de la Ilustración al Romanticismo en Alemania
Autor/es:
MIGUEL ALBERTI
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; XVI Congreso Nacional de Filosofía; 2013
Institución organizadora:
AFRA - UNTREF
Resumen:
En la Crítica de la razón pura la naturaleza era, para Kant, el mero “conjunto de los fenómenos” considerados como sujetos a determinadas reglas que nos permiten, en una palabra, una comprensión satisfactoria del mundo. Este concepto de “naturaleza”, que se adecua cómodamente a los objetivos de la primera Crítica kantiana, entra en conflicto con (o cuanto menos difiere de) otras de sus consideraciones sobre el mismo objeto en distintas obras, anteriores y posteriores a la Crítica de la razón pura: Kant nos da una visión distinta de la naturaleza, por ejemplo, en algunos de sus escritos sobre filosofía de la Historia, en los cuales entiende que esta última está dirigida por un “plan secreto” de la Naturaleza, que habría diseñado sus características peculiares de modo tal que favoreciese el paulatino perfeccionamiento moral de la especie humana; otra visión sobre la naturaleza será la de la Crítica del juicio, en donde la naturaleza aparecerá, desde otra perspectiva, no como el mero polo objetivo del hecho del conocimiento, sino como una fuerza que se opone al hombre que con ella se relaciona y hasta posee la facultad de minimizarlo en el favorecimiento del sentimiento de lo sublime, etc.El devenir del pensamiento alemán inmediatamente posterior a Kant seguirá un rumbo tal que la aséptica definición kantiana de la naturaleza como “conjunto de los fenómenos” dejará su puesto a una noción mucho más dinámica del mundo natural, y mediante el esfuerzo combinado de los filósofos y literatos del idealismo alemán y el primer romanticismo se gestará la idea de una naturaleza de otra jerarquía, con otro grado de autonomía y de protagonismo y con un puesto claramente más cercano a la trascendencia. En todo caso, más cercana a las reflexiones kantianas sobre la naturaleza a las que se aludió en último lugar en el párrafo anterior.Este trabajo tiene como objeto central de estudio el tránsito que se da entre aquella definición kantiana de la Crítica de la razón pura y visiones de la naturaleza surgidas en el mundo intelectual que vino a remplazar al de la Ilustración en Alemania. La búsqueda de un principio unificador que caracterizó a los primeros desarrollos del idealismo alemán estableció una integración mucho más estrecha entre el hombre y la naturaleza, la cual, con el sucederse de las distintas etapas de la filosofía de Schelling, por ejemplo, pasará de polo objetivo del yo subjetivo-objetivo a punto de partida del sistema y más adelante a ámbito poblado de divinidad y cargado de trascendencia. En todo caso, la naturaleza paulatinamente va conquistando un rol vertebrador que reúne en sí su propia presencia con la del hombre y la de Dios en un modo del hén kaì pân como el buscado con igual intensidad por idealistas y románticos alemanes.En efecto, este tránsito recorrido por la noción de “naturaleza” (que forma parte de un tránsito llevado a cabo por un conjunto mayor de conceptos relacionados que incluye junto a la naturaleza, en primer lugar, al yo y a Dios) fue puesto en marcha y acompañado no solamente por quienes reconocemos como los representantes más destacados del idealismo alemán, sino también (y con un grado de innovación y profundidad igualmente significativo) por aquellos que aparecen en los márgenes de la historia del idealismo alemán o, más generalizadamente, son recordados por sus logros en el ámbito de la literatura. El hecho que favorece este aporte compartido, entre otros, es que en este período de la cultura alemana se da, de un modo realmente notable y no muy común, una colaboración mutua estrechísima entre escritores y filósofos, quienes constituyen en muchos sentidos un único grupo y enriquecen unos a otros la producción intelectual y artística de cada uno. Por así decir, el romanticismo alemán se apoyaba sobre las espaldas de las conclusiones de la filosofía del idealismo alemán, el cual, a su vez, encontraba alas y fuerza para el vuelo en las elevadas reflexiones poéticas y filosóficas de los primeros románticos.Este trabajo centra su interés precisamente en ese punto de contacto entre los primeros esfuerzos intelectuales de románticos e idealistas alemanes y fundamentalmente en aquellas reflexiones que se dirigen a la gestación de la nueva idea de naturaleza a la que se aludió en los primeros párrafos de este resumen. El propósito fundamental es estudiar los modos en que, en el marco de una nueva cosmovisión, resulta insuficiente la definición kantiana de “naturaleza” y cómo los intelectuales alemanes de la época, intercambiando perspectivas y conclusiones, desarrollan un nuevo modelo de comprensión del mundo en el que principalmente el yo y la naturaleza establecen una relación mucho más integrada e íntima.Para recuperar ese tránsito considero necesario acudir a fuentes diversas y analizar las relaciones que había entre ellas y cómo fueron enriqueciéndose unas a otras. De modo tal que el trabajo recoge una serie de obras filosóficas y literarias (y fundamentalmente obras que se encuentran en el límite entre una disciplina y la otra) de los últimos años del siglo XVIII y los primeros del XIX, para aludir al cambio general de cosmovisión que se da en Alemania en el paso de la Ilustración al Romanticismo, en particular en relación con el ámbito de lo trascendente, de las ideas trascendentales kantianas, y principalmente con la posición que ocupará en ese marco la naturaleza en la producción intelectual de quienes, siguiendo hasta donde consideraban posible los pasos de Kant, pretendieron dar a sus logros una vitalidad renovada y consecuencias más abarcadoras y unificadas.