CIPYP   05508
CENTRO DE INVESTIGACIONES SOBRE PORFIRINAS Y PORFIRIAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
ESTUDIOS GENETICOS EN PACIENTES CON PORFIRIA CUTANEA TARDIA. DETECCIÓN DE 2 NUEVAS MUTACIONES
Autor/es:
MEDINA NANCY; COLOMBO FEDERICO P; PIÑEIRO PAUWELS MARÍA BELÉN; ROSSETTI MARÍA VICTORIA; BATLLE ALCIRA; PARERA VICTORIA E
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; 14º congreso Internacional de Medicina Interna del Hospital de Clínicas; 2012
Institución organizadora:
Hospital de Clínicas
Resumen:
La Porfiria Cutánea Tardía (PCT) se caracteriza clínicamente por fotosensibilidad cutánea con ampollas en áreas expuestas, fragilidad de la piel, hiperpigmentación e hipertricosis. Bioquímicamente se presentan valores elevados de porfirinas altamente carboxiladas, especialmente uroporfirina y heptaporfirina, en plasma y orina. La deficiencia enzimática se encuentra a nivel de la enzima Uroporfirinógeno decarboxilasa (URO-D), que cataliza la conversión del uroporfirinógeno III en coproporfirinógeno III. Hay dos formas principales de PCT: tipo I (esporádica o adquirida) y tipo II (familiar o hereditaria). La PCT tipo II se transmite como un carácter autosómico dominante con baja penetrancia y la actividad enzimática está reducida aproximadamente un 50%. El tipo I es la forma más común de PCT (70-80%) y la deficiencia enzimática está restringida al hígado. La PCT generalmente se desencadena por diversos factores tales como el alcohol, hierro, hidrocarburos polihalogenados y drogas porfirinogénicas. El objetivo de este trabajo fue detectar las mutaciones en el gen que codifica para la URO-D responsables de la PCT en cada paciente. Materiales y métodos: Se estudiaron 5 nuevos pacientes (4 mujeres y 1 varón) de edades entre 8 y 46 años. El diagnóstico de PCT se realizó en base a la determinación de porfirinas plasmáticas, porfirinas totales urinarias y su patrón cromatográfico. Para los estudios genéticos, el DNA extraído de sangre periférica se amplificó y se secuenciaron automáticamente las regiones codificantes y uniones intrón/exón de los genes que codifican para la URO-D y para la Uroporfirinógeno sintetasa (URO-S),  con los primers adecuados.   Resultados: En la paciente 1, de 28 años, se detectó una mutación nueva: p.P158S  (c.472C>T). Es la única de su familia que presentó manifestaciones cutáneas probablemente desencadenadas por el uso de anticonceptivos orales. En la paciente 2, de 46 años, se detectó otra mutación nueva: p.A251EfsX7  (c.494T>G). La porfiria se desencadenó a los 26 años y tanto su padre como una hija de 19 años están diagnosticados como PCT sintomáticos. En el caso de la  paciente 3, de 8 años, el patrón de excreción de porfirinas urinarias no se correspondía con el de una PCT, indicando que podría tratarse de una PCT incipiente, de una Porfiria Hepatoeritropoyética (PHE: forma homocigota de la PCT) o de una Porfiria Congénita Eritropoyética (PCE), producida por mutaciones en la URO-S. El estudio genético descartó una PCE y una PHE confirmando una PCT; detectando en esta paciente la mutación más frecuente en Argentina: g. 10-12insA. Tanto la paciente 4, de 27 años como el paciente 5, de 11 años, presentaron la segunda mutación más común en nuestro país: p.M165R (c.494T>G). Mientras que la paciente 4 desencadenó la PCT por el uso de anticonceptivos orales, el paciente 5 sufre de insuficiencia renal crónica desde los 6 años y su tratamiento incluía sulfato de hierro, probable desencadenante de la porfiria.     Conclusiones: En los 5 pacientes estudiados hemos detectado 2 mutaciones no descriptas hasta el momento (p.P158S y p.A251EfsX7), en otro encontramos la mutación  g. 10-12insA llevando la prevalencia de la misma a 28% en nuestro país y en los 2 restantes, la mutación p.M165R con una frecuencia de 15% en la población argentina. La detección de la mutación responsable de la Porfiria permite llevar a cabo el diagnóstico presintomático con absoluta certeza y asesorar a los portadores de la falla enzimática a fin de prevenir el contacto con los agentes desencadenantes y consecuente manifestación de la enfermedad. El estudio genético permite asimismo realizar el diagnóstico diferencial de Porfiria como se evidencia en el caso de la paciente 3.