INVESTIGADORES
ROMAGNOLI Venettia
congresos y reuniones científicas
Título:
El Ethos Social del Estado y su influencia en la configuración de los espacios públicos
Autor/es:
ROMAGNOLI, VENETTIA
Lugar:
Resistencia, Chaco
Reunión:
Jornada; Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 de la Universidad Nacional del Nordeste; 2005
Institución organizadora:
Secretaría General de Ciencia y Técnica de la Universidad Nacional del Nordeste
Resumen:
El Estado ha ejercido a través del tiempo un orden disciplinario sobre la producción de la vida social, en donde el Espacio Urbano Público tuvo por finalidad contribuir a viabilizar dicho ordenamiento social. En relación a esto BORDIEUX señala que “la razón por la cual se exige tan rigurosamente la sumisión a los ritos colectivos es que las formas temporales y las estructuras espaciales, estructuran, no solo la representación del mundo del grupo, sino al  grupo como tal, el que se ordena a sí mismo a partir de esta representación”. La Argentina históricamente ha sufrido un proceso de transculturación, la plaza, el parque, el espacio verde público en general, han acompañado ese proceso en distintos roles y con distintos objetivos, lo que se tradujo en la instauración consecutiva de diferentes modelos que plasmaron desigualmente nuestras necesidades (reales o transplantadas) pero que poco a poco fueron asumidos por una sociedad que hoy los considera como propios, formando ya parte indisoluble de la memoria colectiva. El espacio verde público en nuestro país, respondió en una primera etapa al modelo español sin vegetación y posteriormente al modelo francés verde. Este último perduró como mera copia de la copia hasta la década del 1970 cuando, junto con la dictadura militar, se trató de instaurar un modelo devenido de esa ideología sustentadora: las plazas de cemento.  El modelo español plasmado en el espacio urbano acompañó al proceso de colonización con la eficacia de todo modelo erigido para cumplimentar dicho propósito, justamente colonial. Fue válido y útil para sustentar un poder y una ideología inobjetados. Con el cambio político ineludible producido por la Revolución de Mayo y la independencia tutelar de España, comenzó a gestarse, a su vez, un cambio acorde en la estructura de la ciudad. La demora en la concreción estable de ese cambio político arrastró consigo al cambio urbano y debieron transcurrir muchas décadas para que un nuevo modelo pudiera instaurarse. (BERJMAN, 2001). Desde 1850 a 1880 podemos establecer una franja de coexistencia de los dos modelos: el español en retroceso y el francés en avance. A partir de 1880, con el establecimiento perdurable del modelo francés se produjo un fenómeno que podríamos denominar de “encuentro de dos culturas”, ya que en nuestro suelo se hallaba sedimentada una realidad de tres siglos que acogió las nuevas pautas cosmopolitas en una transculturación real. Esta particularidad se vuelve significativa en nuestros contexto, si pensamos que la fundación de Resistencia se dio precisamente en ese momento coyuntural, y consecuentemente la ciudad y la plaza emergentes adquirieron particularidades propias de ambos modelos. Posteriormente, ya en el siglo XX, con la dictadura militar en nuestro país, el espacio público adquiere otra significación, en donde el rol de un Estado autoritario se plasma en la configuración de un nuevo modelo: las denominadas “plazas grises”.