BECAS
SILVESTRI SebastiÁn HÉctor
congresos y reuniones científicas
Título:
Arqueobotánica en la arqueología histórica de Mendoza.
Autor/es:
MAFFERRA, LUIS; SILVESTRI, SEBASTIÁN; HORACIO CHIAVAZZA
Lugar:
Rosario, Argentina
Reunión:
Congreso; III Congreso Nacional de Arqueología Histórica; 2006
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Rosario
Resumen:
En la arqueología de Mendoza el registro arqueobotánico ha sido mencionado esporádicamente, siendo muy poco tenido en cuenta en las interpretaciones tanto de las ocupaciones como de los procesos. En el caso particular de la arqueología de lapsos históricos esto resulta más llamativo, dado que aún habiéndose trabajado gran cantidad de sitios, tanto en sectores urbanos como rurales, las menciones no consideran el rol que tuvieron los productos cultivados en el proceso de interacción cultural y de transformación social, limitándose en el mejor de los casos a mencionar presencias y ausencias no cuantificadas.En este contexto, emprendimos un trabajo de búsqueda sistemática de este tipo de evidencias, con el objetivo de ampliar el conocimiento referido a las condiciones de vida de las poblaciones indígenas y su proceso de interacción con los europeos conquistadores, enfatizando el rol jugado por recursos que implican procesos de producción, procesamiento y consumo; y que impactaron sobre los hábitos y modos de vida de los grupos humanos en cuestión.La utilización sistemática de técnicas de recuperación y análisis de material paleobotánico, nos permitió contar conexcelentes muestras arqueobotánicas. Esto permitió dar comienzo a una línea de trabajos, generalmente infravalorada por el prejuicio de que no existían buenas condiciones de conservación. Constatamos el alto potencial de información arqueobotánica que poseen estos sitios ubicados en el casco colonial de la ciudad de Mendoza. Este potencial fue conocido utilizando diferentes técnicas para la recuperación, conservación y análisis del material. En el caso de la recuperación evaluamos la técnica de lavado en columna y de flotación, resultando más efectiva la primera debido a que los sedimentos se mostraron más susceptibles (téngase en cuenta que en el tamizado en seco no se podían detectar restos botánicos). Con respecto al análisis optamos por la comparación taxonómica de los restos de semillas arqueológicas con colecciones de referencia y manuales especializados. De acuerdo a los resultados preliminares de análisis en curso, podemos constatar que el taxón predominante es el trigo seguido por la cebaday la avena, han aparecido gran cantidad de carozos de duraznos y de aceitunas, como así también semillas de vid y de alfalfa. Todos estos restos aparecieron carbonizados en contextos de basureros en donde al parecer fueron quemados. Tal estado favoreció su conservación aunque por otro lado algunas semillas de malezas, se conservaron sin estar carbonizadas (podría postularse otro tipo de ingreso al registro, por ejemplo en los adobes y/o tapiales). Un dato de interés es que los taxones predominantes nombrados más arriba corresponderían a ocupaciones prehispánicas tardías y coloniales tempranas. Por lo tanto, para el caso de las primeras, por la aparición de dichas especies neófitas, proponemos como hipótesis de que existió un intercambio temprano entre las poblaciones de ambas vertientes cordilleranas sin que se produjera un avance conquistador, y que desde la fundación de Santiago en 1541, los europeos habrían aportado estas especies a nuestra región por medio del traslado que hacían los huarpes entre una y otra vertiente. A partir de las características de los contextos excavados,también podría uestionarse la clara filiación agrícola atribuida a los Huarpes prehispánicos del valle de Huentota, ya que en ningún caso se descubrieron restos de maíz, poroto o quínoa, y en iguales condiciones de depositación, aparecieron algunas de las especies neófitas nombradas más arriba. Las implicancias de la hipótesis nos llevan a una derivada, y que se refiere a la estrategia de conquista del Cuyo de los huarpes, la que habría tenido por lo menos tres pulsos. A los conocidos historiográficamente de exploración (1551) y colonización (1561-1562) le habría precedido uno de implantación de productos (por lo menos desde 1541), y que llevó a los grupos nativos a reajustar sus prácticas y modalidades económicas, haciendo de este modo más propicio el posterior avance y consolidación de la conquista una vez que esta se decidió (aunque esta introducción de nuevas modalidades productivas y nuevos productos no necesariamente se ejecutó de modo consciente). La hipótesis es ambiciosa y tiene como debilidad la resolución temporal demandada al registro arqueológico (microescala), pero deja sentadas las bases para una búsqueda orientada a la explicación de los procesos de cambio e interacción cultural experimentados en este sector de América a mediados del siglo XVI.