IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
“Esclavos cristianos en la pantalla grande: historia antigua y epopeya norteamericana”.
Autor/es:
SPLÉNDIDO, MARIANO
Lugar:
México DF
Reunión:
Congreso; IIIº Congreso Internacional de Estudios Clásicos en México. La tradición clásica en Occidente.; 2011
Institución organizadora:
Universidad Autónoma de México
Resumen:
     La Guerra Fría fue un gran incentivo para la industria cinematográfica norteamericana, que hacia la década del 1950 se volcó al cine bíblico en busca de proyectar la epopeya nacional a partir de una relectura de las Escrituras. El tema de la esclavitud es central en los argumentos de estas producciones, muchas de las cuales tenían como protagonistas a esclavos que hacían del cristianismo el camino de la libertad personal. Por oposición, los emperadores y funcionarios imperiales representaban la opresión y el sometimiento.    Películas como Quo Vadis, El Manto Sagrado, y Demetrio y los gladiadores (sobre las que nos centraremos) proponen una perspectiva política muy marcada al criticar la idea estatal soviética estalinista en la figura del imperio romano gobernado por déspotas como Calígula o Nerón, la antítesis del ideal republicano romano heredado por Estados Unidos. Los catalizadores del conflicto en estas historias eran los esclavos, que corporizaban los ideales individualistas y liberales. Paradójicamente el esclavo cristiano era el modelo de hombre libre en estas producciones, surgidas en un momento en que el análisis histórico buscaba enraizar en la aparición histórica del movimiento cristiano los valores occidentales de libertad y la igualdad. Paul Allard y Henri Wallon a fines del siglo XIX ya habían propuesto esta idea de revolución social silenciosa asociada al cristianismo.    Nuestro objetivo es analizar el prototipo de esclavo cristiano que presentan estas películas para observar cómo se interpretaba popularmente en la sociedad norteamericana de la Edad de Oro la formula cristianismo- libertad- poder- paz. Narrar estas historias tomando como eje el surgimiento del cristianismo aportaba el elemento espiritual que encauzaba el poder, volviéndolo humanitario, a diferencia del ateísmo soviético. Así está expresado en el parlamento final de Quo Vadis: un mundo duradero (el occidental- norteamericano) necesitaba una fe duradera. Uno no es posible sin la otra.