INVESTIGADORES
GIAMBIAGI Laura Beatriz
congresos y reuniones científicas
Título:
Caracterización del ciclo magmático gondwánico del Grupo Choiyoi en el Cordón del Portillo, Cordillera Frontal de Mendoza
Autor/es:
MARTINEZ Y GIAMBIAGI
Lugar:
San Salvador de Jujuy
Reunión:
Congreso; XVII Congreso Geológico Argentino; 2008
Resumen:
El ciclo magmático gondwánico vinculado al Grupo Choiyoi se encuentra representado en los alrededores de la localidad del Manzano Histórico, situada en la ladera oriental del cordón del Portillo, Cordillera Frontal de Mendoza. Las unidades ígneas fueron agrupadas en tres secciones: superior, media e inferior, en función de sus características mineralógicas, petrográficas, geoquímicas y estratigráficas, presentando cada una de ellas una impronta tectónica particular (Martinez 2004). La Sección Inferior está compuesta por lavas basálticas y andesíticas, agrupadas bajo la denominación de Formación Cerro Pajaritos (Martinez 2004). Las mismas se encuentran ubicadas en el cerro homónimo donde pueden reconocerse hasta siete coladas, ya que guardan su morfología de lavas. Son rocas de color negro con variaciones texturales desde porfírica hasta afírica. Los fenocristales de plagioclasa de hasta 7 cm de largo, se orientan subparalelos al flujo. Los basaltos están atravesados por diques ácidos y venas leucocráticas provenientes de los cuerpos graníticos. Presentan xenolitos y colgajos de la caja metamórfica. Estas rocas constituyen coladas fluidas basálticas con texturas que van desde porfíricas a microporfíricas. La intrusión de cuerpos graníticos generó sobre estas rocas un metamorfismo térmico transformándolas en un hornfels biotítico anfibólico, formados a partir del protolito basáltico. La Sección Media está formada por ignimbritas riolíticas líticas, cristalinas y vítreas, junto a lavas de igual composición. Las ignimbritas líticas forman la base de la sucesión piroclástica y muestra los tres tipos posibles de líticos: accesorios; cognatos y accidentales, los que dan información sobre las rocas que forman el conducto y las paredes de la boca de emisión. Presentan varios colores, tales como grises, negro, blanco, morados y violetas, y poseen líticos accesorios basálticos y cognatos de ignimbritas y calcedonia. Sus tamaños son variados desde 1 mm hasta 20 cm de diámetro. Las ignimbritas presentan textura porfiroclástica dentro de una matriz microgranosa y eutaxítica que se acomoda a los contornos cristalinos. Los fenoclastos son de cuarzo, plagioclasa y feldespato potásico y como accesorios apatito, circón, turmalina y minerales opacos. La Sección Media también está integrada por ignimbritas cristalinas que presentan gran variación del color de la pasta: violeta, rosa, gris, morado, negro, rojo, verde, celeste y blanco. Esta unidad presenta textura eutaxítica y porfíroclástica dentro de una matriz afanítica, donde los fenoclastos de cuarzo y feldespato potásico euhedrales constituyen más del 50% de la roca. En algunos afloramientos, la baja relación alto/largo de las pómez dificulta el reconocimiento de la textura eutaxítica, enmascarando su carácter piroclástico, ya que el grado de soldadura es muy alto. Al microscopio, las ignimbritas muestran textura porfiroclástica con fenoclastos de cuarzo, plagioclasa, feldespato potásico y biotita, dentro de una matriz microgranosa, granofírica y esferulítica, con marcada fluidalidad dada por las trizas volcánicas deformadas. Los minerales accesorios son circón, apatito rosado euhedrales, turmalina, allanita y minerales opacos. Las ignimbritas vítreas de la Sección Media son rocas de color negro, morado, gris y rojo y muestran textura afanítica siendo difícil reconocer la textura eutaxítica en muestra de mano, la cual solo se observa bajo el microscopio. Las rocas muestran textura eutaxítica con cristaloclastos de cuarzo, microclino y plagioclasa, los cuales constituyen menos del 50% de la roca y están sumidos en una matriz de polvo volcánico, trizas y pómez deformadas y desvitrificadas. La biotita se encuentra asociada a los minerales opacos. Los minerales accesorios están compuestos por minerales opacos, circones y apatitos euhedrales. Las lavas riolíticas de la Sección Media presentan textura porfírica con fenocristales de cuarzo y feldespato potásico dentro de una pasta de colores rojo, celeste, rosa y blanco. Pueden mostrar venas de cuarzo lechoso de 1,5 cm de ancho con geodas por su formación superficial. El espesor del paquete lávico posee un valor cercano a los 300 metros. Debido a la devitrificación, se desarrollan esferulitas de hasta 20 cm de diámetro formadas por cuarzo y feldespato potásico o por un núcleo de calcedonia con un reborde de minerales fibrosos radiales. La textura de foliación por flujo generada por el avance de la lava fue reconocida en ciertos sectores del afloramiento, donde el bandeamiento está definido por capas más ricas en minerales opacos y óxidos de hierro. Las rocas presentan textura glomeroporfírica y porfírica con fenocristales de cuarzo, plagioclasa y sanidina dentro de una pasta esferulítica a microgranosa. Las esferulitas están compuestas por un núcleo de cristales de cuarzo u opacos con bordes de feldespato potásico. La Sección Superior está integrada por pórfidos e intrusivos graníticos. Los pórfidos graníticos son de color gris verdoso, con textura granosa gruesa y están constituidos por feldespato, biotita y cuarzo de tamaño de grano medio. Están atravesados por diques, venas graníticas y de cuarzo provenientes de los intrusivos graníticos. Las pórfidos presentan textura porfírica dentro de una pasta granofírica. Los fenocristales son de cuarzo, feldespato potásico y plagioclasa, biotita y allanita, circón, apatitos y minerales opacos. Otra facies de la misma unidad la constituyen rocas de color rojo y de textura porfírica compuestas por cuarzo, feldespato, biotita, prismas de circón y minerales opacos. Ambas rocas presentan xenolitos de esquistos e ignimbritas e intruyen a las rocas volcánicas. Los intrusivos graníticos de la Sección Superior están asociados íntimamente con los pórfidos granodioríticos e intruyen a las rocas volcánicas. Son rocas de color rosado y blanco, de tamaño de grano medio y textura granosa gruesa. Están compuestas por cuarzo, feldespato, muscovita y biotita, allanita, apatitos y minerales opacos. Se encuentran recubiertos por barniz del desierto que le confiere un aspecto negruzco. Poseen xenolitos de ignimbritas, de basaltos, de los pórfidos granodioríticos y de esquistos de tamaños variados. También muestran colgajos de mayores tamaños de la caja metamórfica dentro de los cuerpos ígneos y diques y venas graníticas de carácter tardío. Los granitos son subsolvus por encontrarse coexistiendo los dos feldespatos, indicando que su cristalización fue lenta. La presencia de allanita indica también cierta alcalinidad para estas rocas, permitiendo relacionarlas con los pórfidos graníticos, indicando una fuente similar para ambos, al igual que para las ignimbritas cristalinas, que también poseen el mismo mineral accesorio. Cabe destacar que todo el magmatismo gondwánico es posterior a la fase orogénica San Rafael de edad pérmica temprana, la cual deformó a las unidades más antiguas que el Grupo Choiyoi. Las lavas de la Sección Inferior muestran cierta afinidad composicional con las lavas andesíticas que Folguera et al. (2001) correlacionaron con la Formación Portezuelo del Cenizo, cuya edad fue acotada en 281±10 Ma (Pérmico Temprano). Por lo tanto, las rocas de la Formación Cerro Pajaritos podrían tener una edad equivalente. Las unidades de la Sección Media fueron datadas mediante K/Ar sobre los fenocristales de feldespato potásico presente en una ignimbrita vítrea riolítica, arrojando la misma una edad pérmica media (266±6 Ma en Martinez 2004). Estas rocas también podrían correlacionarse con la Formación Mal País, cuya edad es de 263±15 Ma, determinada mediante el método de K/Ar realizada sobre una dacita (Folguera et al. 2001), resultando ser su edad pérmica media. La edad para estas rocas no está definida en forma absoluta, pero puede realizarse una correlación con el granito del cerro Punta Negra, situado más al Oeste y fuera del área de estudio, datado en 234±10 Ma (Triásico Medio) por Caminos et al. (1988). Por lo tanto, una edad triásica temprana a media sería coherente con lo descripto también en Martinez y Giambiagi (este congreso). La Sección Inferior está compuesta por rocas básicas e intermedias las cuales fueron generadas a partir de un arco volcánico instalado en un borde convergente de placas, formando así magmas con impronta de la cuña astenosférica. La Sección Media está integrada por rocas volcánicas ácidas de carácter meta a peraluminoso, originadas en un arco volcánico situado en una corteza de espesor normal. Su génesis estaría vinculada a la fusión de la corteza, por la instalación de un subplacado basáltico en su base de la litósfera La Sección Superior, está constituida por rocas volcánicas e intrusitas ácidas, peraluminosas creadas en un ambiente extensional de intraplaca post-orogénico, donde las evidencias de la cuña astenosférica son más débiles por la deshidratación de la misma. El espesor cortical al momento de su formación, fue menor que el vigente durante el desarrollo de las secciones más antiguas.