INVESTIGADORES
LIPINA Sebastian Javier
congresos y reuniones científicas
Título:
Neurociencia Cognitiva del Desarrollo y riesgo social. Consideraciones para la inclusión de contenidos en asignaturas de carreras de Humanidades
Autor/es:
NEUROCIENCIA, R. N. C.; UNSAM,; SEBASTIAN J LIPINA
Lugar:
San Martin
Reunión:
Congreso; IX Jornada Nacional de Cátedras de Neurociencia; 2006
Institución organizadora:
Red Nacional de Cátedras de Neurociencia, Universidad Nacional de San Martin
Resumen:
El estudio del desarrollo infantil plantea un conjunto diverso de interrogantes fundamentales, analizados por diferentes abordajes teóricos y modelos de investigación. Si bien diferentes investigadores y profesionales representantes de estos abordajes podrían seleccionar algunos temas específicos como a los más importantes, existe un acuerdo entre ellos acerca de que al menos los siguientes se encuentran entre los centrales: (a) los aportes y relaciones de la constitución biológica y el ambiente de crianza; (b) la contribución de la propia actividad de los niños; (c) la naturaleza tanto continua como discontinúa de diferentes procesos; (d) la presencia de mecanismos de cambio a nivel biológico, de los procesos mentales o cognitivos y de la conducta social; (e) la significativa modulación del contexto sociocultural; y (f) la importancia de la investigación para mejorar el desarrollo infantil, en términos de sus implicancias para la crianza en el hogar, la educación y la política social. Al pensar en el crecimiento físico de los niños, se suele hacer referencia a las características biológicas con las que comienzan sus vidas, incluyendo a los períodos previos al nacimiento –la etapa prenatal. Por el contrario, al pensar en el ambiente de crianza en el que se da el desarrollo, se suelen enfatizar las experiencias y prácticas de crianza de la vida cotidiana provistas por los adultos. Desde esta perspectiva, podría pensarse que la crianza sería como un escultor que le va dando forma progresivamente a la materia prima biológica. Si bien esta metáfora ha resultado atractiva por mucho tiempo, la realidad es mucho más compleja. Una de las fuentes de esta complejidad está dada por el hecho que los niños exploran activamente sus experiencias, involucrándose en ellas con intereses y motivaciones propios, e influyendo de esta manera la interacción con los adultos que los cuidan y crían, en un contexto sociocultural complejo. Otra fuente de complejidad está dada por el momento del desarrollo en el cual ocurren ciertos eventos, dado que el contexto sociocultural influye sobre las características biológicas aún antes del nacimiento y ambas sobre el desarrollo durante todo el ciclo de la vida.