INVESTIGADORES
KALPOKAS Daniel Enrique
congresos y reuniones científicas
Título:
Experiencia perceptiva y justificación
Autor/es:
DANIEL ENRIQUE KALPOKAS
Lugar:
Santiago de Chile
Reunión:
Workshop; III Coloquio Internacional; 2011
Resumen:
En Mind and World y trabajos subsecuentes, McDowell sostiene que (a) las experiencias constituyen razones para nuestras creencias, y (b) es en virtud de esa vinculación racional, normativa o epistémica  entre experiencias y creencias que el pensamiento puede referirse al mundo empírico (McDowell, 1994, 2002, 2009ª, 2009b). Sin embargo, la tesis (a) ha sido cuestionada de diversas maneras. En este trabajo quiero evaluar específicamente una de esas objeciones. Según McDowell, si bien es cierto que la experiencia perceptiva nos presenta el mundo articulado conceptualmente (nos "dice" que el mundo es de un modo u otro), lo hace de manera pasiva, como si fuera una "invitación" (2002) . Uno puede juzgar que el mundo es como lo presenta la experiencia, o puede rechazar lo presentado por ella. La objeción que consideraré dice que, debido a su carácter inerte, las experiencias por sí mismas son incapaces de constituir razones para la creencia (Davidson 2001, Stroud 2002, Glüer 2004). Sólo una proposición aceptada como verdadera, es decir, creída, puede ser una razón. Mi tesis es que, si bien hay algo de cierto en esta objeción (sólo un contenido aceptado puede ser una razón para creer algo), ello no es suficiente para rechazar el carácter epistemológico que el empirismo mínimo atribuye a la experiencia perceptiva.En la primera sección de este trabajo reconstruyo sucintamente la posición de McDowell a fin de poner de manifiesto cuál es la relevancia epistemológica que este autor atribuye a la experiencia perceptiva [1]. En la siguiente, presento la objeción referida [2]. En las dos secciones ulteriores discuto la objeción antedicha. Puesto que los críticos de McDowell concluyen ?a partir de su objeción- que las experiencias perceptivas carecen de todo contenido (por eso sólo causan creencias, pero no las justifican), primero presento varias razones para distinguir entre experiencias y creencias en tanto ocurrencias y estados diferentes, cada uno con su propio y distintivo contenido. Argumento, por ejemplo, que, mientras que las creencias son representaciones del mundo, las experiencias son presentaciones de él; que si las experiencias fuesen un mero eslabón causal entre la mente y el mundo (Davidson), sería imposible saber cuál es la causa de nuestras creencias; y que existen casos bien conocidos que muestran la independencia de la experiencia con respecto a la creencia (Evans, 1982, McDowell 2009b) [3]. En la sección siguiente, para mostrar el tipo particular de actitud involucrada en la percepción, pongo en conexión (i) la observación de Ryle (1949) según la cual los verbos de percepción son verbos de éxito con (ii) la idea de que la percepción posee carácter factivo. (i) y (ii), combinados con la concepción de la experiencia como apertura al mundo, explican la particular actitud presente en la experiencia perceptiva. Ello permite sortear la objeción antedicha al destacar que la percepción no es inerte, sino que involucra una actitud especial de aceptación de un contenido no doxástico. Dicha actitud queda reflejada en el logro cognitivo en que consiste percibir algo (la aprehensión de cómo es el mundo) o en el carácter factivo del percibir. Esta sección cierra con un análisis que muestra el papel justificatorio que desempeñan las oraciones que expresan percepciones [4]. La sección final sólo sintetiza mi posición al respecto [5]..