INVESTIGADORES
QUIROGA Laura
congresos y reuniones científicas
Título:
ENTRA LA HUIDA Y EL LEVANTAMIENTO: FORMAS Y ESCALAS DE LA RESISTENCIA DIAGUITA (TUCUMÁN 1610)
Autor/es:
LAURA QUIROGA
Lugar:
São Cristóvão - Sergipe
Reunión:
Encuentro; IX Encontro Internacional de História Colonial; 2023
Institución organizadora:
Universidade Federal de Sergipe,
Resumen:
El Tesoro de lalengua castellana de Sebastián de Covarrubias Horozco de 1611, utiliza el verbohuir para referirse a “esclavos cautivos, o presos que huyen del poder” (1611:62). Por eso el autor señalaba “no se tiene por valentía pudiéndose escapar,hazer rostro a los que evidentemente le han de rendir o matar”. Por lo tanto,la huida no era un acto de cobardía, sino, de supervivencia. Un año antes a laedición de esta obra, el virrey del Perú Marqués de Montesclaros escribía alRey acerca de las formas y motivos de la resistencia diaguita, sucedidas en elvalle de Anguinahao o yocavil entre 1609 y 1610. Habiendo recibido las cartasdel Gobernador del Tucumán Alonso de Ribera, en que le informaba la gravedad delos hechos, a los que calificaba como levantamiento, el Rey estimaba necesariala consulta al Virrey de Lima, acerca de los mismos sucesos de Yocavil. Elmarques respondió con una carta en la que relataba los hechos al tiempo quebrindaba su opinión al respecto: “nunca daría nombre de levantamiento a lo quese puede llamar huida que hacen estos miserables como esclavos del miedo de lascrueldades de quien no contentándose de servirse de su trabajo los despoja detodo punto de su libertad, hijos y mujeres” Con estas palabras, el Virreyconsideraba la huida como un hecho de menor gravedad que el levantamiento,conducta originada y justificada en los abusos que los encomenderos ejercíansobre las condiciones del trabajo en la encomienda de servicio personal. Este trabajopropone una revisión de los vocabularios utilizados por la autoridad virreinalno solo para conceptualizar la escala y las formas de la resistencia al sistemade trabajo y traslados forzosos instalado por la avanzada colonial, sinotambién las políticas de pacificación impulsadas por el Virrey del Peru,Marques de Montesclaros. A través de la lectura de sus escritos y normativasestablecimos dos líneas de gestión política de la rebelión: controlar lafundación urbana en los territorios diaguitas y al mismo tiempo, limitar losabusos de los encomenderos a través de la tasación de los tributos con el finde erradicar las formas del servicio personal. La carta del Virrey al oidor dela Audiencia de Charcas Francisco de Alfaro señala que el visitador debíaobservar no solo las condiciones del trabajo de los indios de encomienda, sinotambién, otras formas ilegales de sujeción como la venta de indios y cautivos,el reparto de piezas y las entradas punitivas a los pueblos no conquistados ohuidos, resultado de las malocas y entradas. Como vemos las condiciones de losindios de los valles de Londres y Calchaqui distaban significativamente delmodelo toledano de tasación del tributo que se aspiraba instalar en la región.