INVESTIGADORES
MIE fabian Gustavo
congresos y reuniones científicas
Título:
Esencia, identidad y definición en Metafísica Z 6
Autor/es:
FABIAN MIE
Lugar:
Macerata
Reunión:
Exposición; Lección en el Doctorado de investigación en Historia de la Filosofía; 2013
Institución organizadora:
Università degli Studi di Macerata
Resumen:
(a) En Z 4 Aristóteles admite que son definibles estrictamente sólo las sustancias, pero también entidades no sustanciales (los accidentes tomados por sí mismos); (b) en Z 5 continúa haciendo más amplio el dominio de entidades definibles, alcanzando ahora a los compuestos por sí (definibles por adición). La novedad más importante de Z 5 es que la definición se admite para entidades que no poseen esencia (mientras que Z 4 le adjudicaba a los accidentes una esencia). (c) Sin embargo, todo esto reafirma que la definibilidad es una condición meramente necesaria, pero no suficiente para seleccionar sustancias, en la medida en que se desacopla la definición de la esencia (porque hay entidades definibles que no poseen esencia, los compuestos por sí de Z 5), e igualmente se desacopla la esencia de la sustancia (los accidentes también tienen esencia en Z 4). Si consideramos las anteriores conclusiones, particularmente (c), creo que podemos esperar que en Z 6 Aristóteles examine la tesis que en Z 4 (cfr. 1029b13-16) condujo a sostener que la esencia, correlato de la definición, es algo idéntico con aquello de que es, precisamente, esencia, es decir, con el objeto. La idea muy general y algo vaga de Z 4 al respecto fue que la esencia de algo es aquella característica que le pertenece a a algo en cuanto a lo que él mismo es. De allí que la esencia se dice que es algo propio de la cosa, algo que se dice de la cosa considerada por sí misma. En Z 4 Aristóteles también dijo que la esencia es la sustancia (el TEE es la ousía) de una cosa, y eso le permitió, en un primer movimiento, establecer que la esencia es una condición suficiente para seleccionar sustancias. Pero Z 4, en su continuidad, y Z 5 mostraron, como vimos, que no todo lo definible es una esencia y que hay también cosas que tienen esencias pero que no son sustancias. Eso puso en crisis, digamos, la utilización del recurso de la esencia para hallar sustancias; pero no puso en entredicho que todo lo que es sustancia tiene una esencia. En Z 6 Aristóteles se aboca a investigar esto, es decir, cómo hay que entender y qué implica que cada sustancia sea idéntica a su esencia. Quizá Aristóteles trata de enmendar ahora la algo vaga consideración aquí arriba señalada, según la cual la esencia de algo es lo que le pertenece a eso por sí mismo. Pero además es una manera de aclarar una tesis que se mantiene en estos capítulos dedicados a la investigación de la esencia, la tesis de que toda sustancia propiamente dicha tiene una esencia, y la tiene en un sentido primario o absoluto.