INVESTIGADORES
MASSHOLDER Alexia Guillermina
congresos y reuniones científicas
Título:
Centenario, sesquicentenario y bicentenario
Autor/es:
ALEXIA MASSHOLDER
Lugar:
La Habana
Reunión:
Conferencia; IX Conferencia de Estudios Americanos, “América Latina y el Caribe: ante los desafíos de la Segunda Independencia; 2010
Institución organizadora:
Centro de Estudios sobre América
Resumen:
En el marco de una investigación histórica sobre la obra de Héctor P. Agosti (1911 – 1984), intelectual comunista argentino, la celebración del sesquicentenario de la Revolución de Mayo se presentó como uno de los temas sobre los que reflexionó el autor. Con los recientes festejos del bicentenario, celebrados no sólo en Argentina sino en otros países de América Latina, fue en cierta forma inevitable pensar sobre las posibles relaciones entre las coyunturas que enmarcaron ambos festejos. Si bien no es el pensamiento de Agosti el eje central de este trabajo, fueron sus planteos en torno al sesquicentenario los que dispararon algunas de las reflexiones que desarrollaremos a continuación. Dejando de lado la fastuosidad de los festejos oficiales argentinos, para los que se desembolsó una gran suma de dinero[1], la problematización y el debate acerca de la independencia de ayer y de hoy no tuvo el protagonismo que, a nuestro entender, debió haber tenido. Creemos que una actualización de dicho debate es fundamental,  y que teniendo en cuenta la actual coyuntura latinoamericano el tema de una “segunda independencia”, verdadera y definitiva, no debe limitarse al marco de la celebración  y las efemérides. Pensar hoy sobre el carácter de la revolución, los sujetos involucrados en ella y las características de la “libertad” de la que gozamos las “democracias” que gobiernan países como la Argentina, es fundamental para que el bicentenario no haya sido  solo una celebración, sino un momento de reflexión sobre nuestras naciones, en tiempos en los que la “máscara” de Fernando VII, por la cual algunos sectores de poder criollo se entronaron como elites a principios del siglo XIX dejando intactas las estructuras de dominación económica y desigualdad social, ha sido hoy reemplazada por los “velos” de la democracia formal y el fantasma del terrorismo que, en manos de cada vez menos hombres, continúan despojando hasta extremos escandalosos a cada vez más hombres.