INVESTIGADORES
STROK Natalia Soledad
congresos y reuniones científicas
Título:
El tercer tipo de seres como sujeto moral en Anne Conway: metafísica y perspectiva moral
Autor/es:
NATALIA STROK
Reunión:
Congreso; I Encuentro Red Latinoamericana de Estudios sobre Filósofas en la Historia; 2021
Resumen:
En su artículo ?Species and the Good in Anne Conway?s Metaethics? John Grey sostiene la ?universalidad de la subjetividad moral? (universality of moral subjecthood), de acuerdo a la cual todas las creaturas son sujetos morales en la filosofía de Anne Finch Conway (1631-1679) (Grey 2020, p. 107). Grey entiende que esto es consecuencia de sostener la no esencialidad de las especies en la ontología de la filósofa. El motivo de la universalidad de la subjetividad moral se reproduce en otros artículo (Head 2019, p. 13; Orio de Miguel 2004, p. 165; Hutton 2020, p. 45; Roldán 2015, p. 116). Sin embargo, considero que no es una conclusión que se desprenda del texto de Conway, si se tienen en cuenta otros conceptos centrales en su filosofía. Un claro ejemplo de ello es que Grey considera que la sustancia media o Cristo en la propuesta de nuestra autora no juega un rol importante en el desarrollo de su sistema (Grey 2020, nota 9) y por eso no la tiene en cuenta en su análisis. Hutton, por su parte, no analiza el motivo teológico de la creación y multiplicación para el tercer tipo de seres y por eso pierde el foco al intentar explicar el camino de ascenso que propone la filósofa (Hutton 2020, pp. 45-46). En estos casos pareciera que los motivos religiosos que aparecen en la obra de la filósofa tienden a ser desestimados, aunque sean centrales en sus desarrollos argumentativos. En Principia Philosophia antiquissimae et recentissimae (1690) o Principles of the Most Ancient and Modern Philosophies (1692), la única obra de Anne Conway que llegó a nuestros días y que fue publicada póstumamente, la naturaleza, que incluye a todos los seres que se denominan del tercer tipo (aquellos que pueden cambiar tanto hacia el bien como hacia el mal), es buena de acuerdo a la creación del Dios bondadoso, afín al cristianismo en clave platónica. Esto parece ser así no solo en cuanto a su constitución ontológica, sino también en un aspecto moral general sobre el conjunto de las creaturas. Este trabajo pretende mostrar el error con el que algunas interpretaciones leen este tema en la obra de Anne Conway, al entender al tercer tipo de seres o sustancia como si fuera en su conjunto un sujeto moral, sin tener en cuenta que esa dimensión moral, y no ya solo ontológica, se debe a las características de lo que voy a denominar como ?naturaleza humana? y no al resto de la creación. Ese todo moral del que se habla, en el que hay pecados que deben ser subsanados, no hace referencia más que al microcosmos que significa la humanidad, en mi interpretación. Para mostrar esto tomaré los ejemplos del mundo natural y humano que presenta la filósofa y analizaré su vocabulario. Uno de ellos es el del caballo, donde Conway ofrece pistas sobre qué entiende sobre las transmutaciones y su relación con la justicia divina. En otro de sus artículos, Hutton marca correctamente que, al igual que Platón, Conway no ofrece un tratamiento sistemático de sus principios éticos o de la vida virtuosa en sentido moral, aunque sí expresa que de lo que se trata en su exposición, en todo caso, es de dar cuenta de un ?vivir bien?, es decir, de acuerdo a la propia naturaleza y en relación también con el uso, esto último de nuevo en consonancia con Platón en República 610d (Hutton 2018, pp. 230, 233). En el proceso de transmutaciones se pone en juego la justicia divina pero no parece poder darse responsabilidad moral a cada uno de los individuos. En mi opinión, tampoco es posible obtener una conclusión clara sobre cómo habría de adquirir ese ?vivir bien? cualquier tipo de creatura a partir de los ejemplos ofrecidos, si no tenemos en cuenta la mirada de lo humano. Por eso mi hipótesis es que el acento en su filosofía está puesto en lo metafísico, y solo en lo moral cuando se trata de la humanidad, destacándose de esta manera la creatura humana como responsable del ascenso y el descenso ontológico. En síntesis, lo que propongo mostrar es que no es evidente la interpretación que ofrece Grey sobre la universalidad de la subjetividad moral. Para esto presentaré brevemente la filosofía de Anne Conway en general, sus tres tipos de seres y el esquema de la creación, para luego detenerme en las características que presenta el tercer tipo de seres y su relación con la sustancia media o segundo tipo de ser. Analizaré los ejemplos del mundo natural, especialmente del capítulo 6, que ofrece la filósofa, prestando atención a las transmutaciones, y determinaré allí el lugar de lo humano. Por último, ofreceré mis conclusiones.