INVESTIGADORES
WERTHEIMER BECICH Marina Clara
capítulos de libros
Título:
Entre la crisis y un nuevo inicio. La lógica del mundo pandémico y las reconfiguraciones del Estado neoliberal periférico en América Latina
Autor/es:
MARINA WERTHEIMER; DARIO CLEMENTE
Libro:
Estados Alterados : reconfiguraciones estatales, luchas políticas y crisis orgánica en tiempos de pandemia
Editorial:
Muchos Mundos / IEALC / CLACSO
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2020; p. 308 - 321
Resumen:
De Italia a la Argentina. El Estado neoliberal pandémico en un espejo refractario. ?E allora che cosa avverrà? Trattative punteggiate da schioppettate quasi innocue e, dopo, tutto sarà lo stesso mentre tutto sarà cambiato? Giuseppe Tomasi di Lampedusa, Il Gattopardo.Nombre: Dario Clemente, Marina WertheimerCuando, a comienzos de marzo de 2020, la Argentina miraba atónita las cifras diarias de muertes por COVID-19 en Europa, la idea de una cuarentena en el territorio nacional comenzó a presentarse como una probabilidad cada vez más aceptada, incluso cuando todavía eran muy pocos los casos de personas infectadas en este país. Esta posibilidad comenzó a hacerse lugar en las mentes de la mayoría de la población, casi como un reflejo automático ?un tanto distorsionado? a partir de la crisis sanitaria que azotó primero a Italia y después a España. Recién entonces, cuando el Coronavirus hizo estragos en esas ?madres patrias? lejanas ?y cuando la ONU calificó a la enfermedad como pandemia? la población comenzó a dimensionar las implicancias globales de la problemática y a aceptar ?cuando no, exigir? medidas de aislamiento para impedir su propagación. En particular, el norte de Italia, por entonces convertido en epicentro mundial de la pandemia y en una espeluznante muestra del desempeño del Estado neoliberal, se erigía como la referencia de lo que no se debía hacer para enfrentar la enfermedad. Sin embargo, ese reflejo que en un primer momento había parecido muy significativo, al echar luz sobre tendencias comunes a los Estados en la pandemia, con el avance de la misma dejó espacio a las diferencias, las refracciones, entre Argentina e Italia, entre Europa y América Latina, así como entre el Estado neoliberal y su variante periférica. Porque, por un lado, el estallido de la pandemia puede leerse como la precipitación de tres crisis globales, anteriores y concatenadas, aglutinadas en una inédita lógica del mundo (Zavaleta Mercado, 1987) viral: una crisis estructural de acumulación; la afirmación de China como nueva superpotencia junto EE.UU.; y una crisis ecosistémica. Pero, por otro lado, las formas concretas en las cuales la pandemia se desencadenó difieren profundamente según la geografía y la particular lógica del lugar (Zavaleta Mercado, Op. Cit.) que allí reina. Por ello, en este capítulo abordamos ambas dimensiones, fundamentales para poder interpretar el momento pandémico y las reconfiguraciones estatales que este propicia, las cuales se presentan de manera disímil en el centro capitalista y en la periferia latinoamericana. En primer lugar, reconstruimos la lógica del mundo de la coyuntura actual, trastocada profundamente por la pandemia. En este sentido, focalizamos en el origen del virus en el sistema productivo ?particularmente, el agroindustrial?. La producción masiva de alimentos, el hacinamiento de animales y la erradicación de hábitats naturales de especies selváticas ha redundado en el efecto ?derrame?, spillover o ?salto de especie? que viene provocando la trasmisión de nuevas enfermedades a los seres humanos. Desde la proliferación de los contagios en las fábricas europeas, norteamericanas y brasileñas de carne, hasta la reciente propuesta de externalizar parte de la producción de carne porcina china a Argentina (con los pasivos ambientales y sociales que conlleva) el vínculo entre modelo productivo, consumo y salud pública se hace cada vez más evidente. Además, según estudios recientes, la extrema movilidad internacional de ciertos sectores sociales ha permitido la difusión del virus desde China a EE. UU., Italia y Brasil tan pronto como en noviembre de 2019, mucho antes que el coronavirus se transformara en una pandemia global, quizás la primera en la historia con tamaño alcance mundial. Así, los flujos globales de capitales y personas difundieron la enfermedad hacia todo el mundo con una velocidad inusitada. Por ello nos preguntamos ¿qué efecto tiene esta lógica del mundo transformada sobre la capacidad del Estado neoliberal de seguir gobernando los intercambios globales, abriendo y cerrando fronteras, siendo que el Coronavirus ha demostrado el carácter cada vez más precario y ficticio de estas?En una segunda instancia analizamos la lógica del lugar, es decir el Estado neoliberal pandémico en Italia y Argentina, como casos testigo de los reflejos y refracciones en los cuales la periferia se espeja cuando mira al centro capitalista. La dimensión territorial y la lógica del lugar relevan toda su importancia cuando consideramos el caso italiano, donde la propagación del virus ha sido más letal allí donde se encontraban importantes aglomeraciones productivas conectadas a los flujos globales y el sistema sanitario más desgastado por las privatizaciones neoliberales. Pero también cuando analizamos la llegada del virus a Latinoamérica. Una vez llegado a estas latitudes, la enfermedad se reprodujo más velozmente en las zonas más densamente habitadas, con mayores índices de hacinamiento y con menor cobertura de servicios básicos. Es la periferia global, pues, la cual viene recibiendo los golpes más duros de la pandemia. En particular, en América Latina el horizonte sombrío de una próxima ?nueva normalidad? con alto desempleo se suma al difuso descontento que ya desde octubre de 2019 venía cuestionando fuertemente a escala continental la capacidad del Estado neoliberal periférico de atender al bienestar de la población al margen del mantenimiento de las ganancias privadas. De esta forma, al observar cómo el Estado neoliberal viene gestionando la crisis sanitaria en la doble dimensión propuesta ?lógica del mundo y lógica del lugar? advertimos que, por un lado, se ha producido un reflejo (en apariencia, universal) en la improvisación de una especie de ?Estado social de emergencia?, financiado por el retorno al endeudamiento público, y en tanto reconocimiento implícito, pero no explicito, de las falencias del Estado neoliberal en evitar la pandemia y en su manejo. Por el otro, existe una poderosa refracción en las condiciones sociales en las cuales los países del centro y de la periferia se hallan a la hora de enfrentar la crisis sanitaria y económica. Finalmente, caracterizamos la coyuntura como una de crisis orgánica global, la cual, sin embargo, solo puede ser transformada en un verdadero momento de vacancia hegemónica o gratuidad ideológica (Portantiero, 1973; Zavaleta Mercado, 1990) con potencial emancipatorio por el esfuerzo conjunto ?desde abajo?, que aporte a la deconstrucción de las estructuras de poder del Estado neoliberal y las creencias que las sostienen. De otra forma ?tanto para la periferia como para el centro? el peligro es que todo cambie para que nada cambie o volver a una ?normalidad? sin futuro que no podemos permitirnos más.