INVESTIGADORES
RAMOS Ana Margarita
capítulos de libros
Título:
Andábamos por todos lados como maleta de loco: Impactos de un desalojo sobre las memorias y prácticas de la comunidad del Boquete Nahuelpán, noroeste de Chubut
Autor/es:
BRIONES, CLAUDIA; RAMOS, ANA
Libro:
Parentesco y Política: topologías indígenas en Patagonia
Editorial:
Universidad Nacional de Río Negro, Colección Aperturas
Referencias:
Lugar: Viedma; Año: 2016; p. 167 - 211
Resumen:
La comunidad del Boquete Nahuelpán emerge en lo cotidiano como uno de los colectivos más recognoscibles en el noroeste de Chubut. A tan sólo dieciseis kms de la ciudad de Esquel, su visibilidad no sólo resulta de la importancia de Francisco Nahuelpán cómo uno de los "caciques bravos" que retornan o se instalan en la región después de los peregrinajes pos conquista del desierto, sino también de haber devenido ícono de lo indígena a través de una oferta turística que ofrece a los visitantes una excursión de medio día para acercarse a una comunidad mapuche" a comprar artesanías, viajando en "la trochita", tren de alcance local para conectar la línea sur rionegrina con Esquel que por su factura e historia constituye un atractivo peculiar (Manosalva 2011). Pero, además, Nahuelpán como colectivo queda asociado a un desalojo masivo producido en 1937 que se destacó tanto por ser una expulsión sistemática--y no a cuentagotas, como en otros casos, de todas las familias allí radicadas desde fines del siglo XIX, como por tomar estado público para debatir en las cámaras parlamentarias federales la funcionalidad y racionalidad de los latifundios y derivar en la interpelación del Ministro del Interior que lo ordenara. En círculos más vinculados a los entretelones de las políticas indigenistas, esa visibilidad también ha quedado vinculada a los distintos caminos de lucha implementados para lograr primero retornar y, luego, un reconocimiento del derecho a la tierra que, en épocas recientes, conllevó una conflictividad hecha pública tanto al momento de la tramitación de personería jurídica para ser reconocidos por el estado como "comunidad indígena", como al de solicitar el relevamiento de tierras previsto por la Ley Nacional 26160 y sus dos prórrogas. En todo caso, todas estas circunstancias aparejan no poca complejidad al momento de identificar los contornos y devenir del colectivo. Por un lado, porque no es sencillo ni posible estabilizar sus bordes, ni definir de una vez y para siempre qué familias lo han ido integrando, ya que lo que ha primado históricamente son constantes redibujamientos y tensiones. Por el otro, porque las lecturas retrospectivas confrontadas de los sentidos de pertenencia y devenir que nuestros interlocutores nos comparten en la actualidad nos dan acceso menos a las formas en que esos procesos se fueron interpretando en distintos momentos, que al modo en que la dispar re-lectura de experiencias sucesivas ya está hoy sobredeterminada por esos sucesivos redibujamientos y tensiones. Aún así, la manera en que nuestros interlocutores seleccionan y significan determinados hechos para fundamentar sus distintas visiones de comunidad sí son índices de sus distintas formas de evaluar márgenes de maniobra disponibles y hacer jugar la capacidad de agencia propia. En este sentido, nos interesa pensar los procesos y sus efectos en y a través de esas memorias específicas que nos brindan perspectivas evaluativas de conjunto sobre los caminos en cada momento disponibles, sobre los costos de transitarlos o de imaginar otros. En definitiva, no evadir la coexistencia de memorias y lecturas discordantes y descentradas da acceso a los diversos factores que, en los procesos de comunalización, van creando puntos de convergencia pero también de divergencia. Por tanto, nuestro desafío pasará por analizar cómo relaciones políticas y parentales forzadas a continuos desmembramientos van logrando de todos modos reestructurar grupos para sostener pertenencias y trayectorias. Argumentaremos que la puesta en contexto de esos procesos y las distintas visiones sobre sus implicancias y efectos al momento de circunscribir el colectivo no se pueden explicar solamente como mero efecto de imposiciones o de pura agencia; tampoco desde la incidencia excluyente de categorías hegemónicas o de sentidos propios de memoria, parentesco y política. Apuntamos por tanto a mapear, desde un camino topológico, sucesivas conexiones y desconexiones para ver, por un lado, cómo "se permanece juntos" a pesar de desalojos y relocalizaciones parciales y, por el otro, cómo las experiencias de "haber andado juntos" no neutralizan sino que alientan lecturas antagónicas del proceso y distintas visiones de comunidad que no obstante se anclan y disputan un mismo evento fundacional.