INVESTIGADORES
MARCONETTO Maria Bernarda
capítulos de libros
Título:
Linnaeus en el Ambato. Límites del uso de la clasificación taxonómica en Paleoetnobotánica
Autor/es:
MARCONETTO M.B.
Libro:
Arqueobotánica y teoría arqueológica. Discusiones desde Suramérica
Editorial:
Marco Giovannetti, Verónica Lema y Sonia Archila (eds) UNIANDES
Referencias:
Lugar: Bogotá; Año: 2008; p. 143 - 166
Resumen:
Se han planteado largamente en distintas esferas de la Arqueología cuestionamientos al pensamiento y los modelos tipológicos, sin embargo, los límites del empleo de la taxonomía vegetal occidental en Arqueobotánica prácticamente no han sido discutidos. Si concebimos a los restos vegetales como un ítem más del registro arqueológico, sensible como cualquier otro vestigio a las particularidades de una sociedad, posiblemente nos debemos una discusión acerca de la clasificación en nuestra disciplina. Asumiendo que la taxonomía propuesta por el Código Internacional de Nomenclatura Botánica es indiscutiblemente una herramienta descriptiva útil, nos preguntamos ¿cómo no anclarnos a ella a la hora de interpretar nuestros datos? ¿Hasta dónde explica esta taxonomía el registro arqueológico? Si bien estos tipos de clasificaciones son de utilidad a los fines de aprehender el mundo por la ciencia occidental ¿qué sucede cuando el fin es aproximarse a como aprehenden el mundo otros grupos y en otros tiempos? Siendo conscientes de la diversidad de lógicas de vinculación con la naturaleza de los grupos humanos, a las que nos resulta dificultoso acceder debido a las limitaciones de nuestros métodos y las particularidades del registro con el que trabajamos, el hecho de usar una clasificación del mundo forjada en nuestro particular contexto cultural e histórico ¿hasta dónde no genera mayor ruido? Al realizar las identificaciones, los resultados presentan diversas frecuencias de aparición de taxones, estas, están en gran medida ligadas a una serie de acciones del hombre. Destacando en primera instancia la selección, puesto que es esta acción la que define en sí misma a los conjuntos observables como vestigios antrópicos. La selección de recursos puede estar pautada por varios factores, entre ellos, los aspectos socio-económicos y simbólicos, las capacidades técnicas, y también la oferta ambiental (Marconetto 2006). Dependiendo del tipo de vestigio con el que trabajemos -polen, madera carbonizada o no, fitolitos, almidones, frutos, semillas, vainas, etc.- sus particularidades y las herramientas con las que contamos actualmente, nos permiten acceder a distintos niveles de identificación en términos de la taxonomía occidental. El tipo de inferencias y las interpretaciones que realizamos están ligados a este ordenamiento del mundo. El problema es que preocupados por el nivel de identificación alcanzado, podemos perder perspectiva de que el sesgo mayor que enfrentamos, más que a la familia, el género o la especie, se liga a que, quienes generaron el registro precedieron a Linneo en varios siglos o milenios, y que sus prácticas, vinculadas a distintos modos de percibir el mundo, son las que dejaron las huellas vegetales que hoy colocamos bajo nuestro microscopio. Cada vez está más difundida la idea de que la relación material con la realidad depende de la percepción que de ella tengamos, y que si queremos comprender a otras culturas será necesario investigar como percibían ellas la realidad (Hernando 2002).Sin ánimo de realizar un planteo paralizante, sino de pensar en otras posibles miradas, releeremos nuestras propias interpretaciones realizadas a partir de trabajos llevados a cabo en el valle de Ambato (Catamarca ? Argentina) cuyo objetivo fue aproximarnos a las prácticas de gestión de los recursos forestales de los grupos que ocuparon la región en el primer milenio de la era.