INVESTIGADORES
TOPUZIAN Carlos Marcelo
capítulos de libros
Título:
Luis Cernuda y la memoria de la poesía
Autor/es:
MARCELO TOPUZIAN
Libro:
La memoria que no cesa. Perspectivas sobre la Literatura de la Memoria
Editorial:
Editorial Académica Española
Referencias:
Lugar: Saarbrücken; Año: 2013; p. 180 - 194
Resumen:
Tras las vanguardias y la crisis definitiva de su concepción como absoluto y fundante, el discurso poético se vuelve narrativo, pues el carácter constitutivo de su temporalidad se expone con total evidencia . Hay que entender también así, en su función propiamente poética, la importancia de lo coloquial o conversacional de la poesía del Cernuda maduro, sobre el fondo recordado u olvidado, pero nunca todavía definitivamente superado, de la radicalidad del absoluto poético, y no como asimilación del discurso poético a algún tipo de discursividad social efectiva, relativa, por ejemplo, a "la perplejidad sentimental, la insumisión y los deseos de los ciudadanos reales" (García Montero). El "tono coloquial" no solo "abre", en el poema, "la conversación, la posibilidad de decir, la fe en el lenguaje, que [...] une [...] al poeta con el lector" (García Montero); también confronta a este último con la pérdida del atisbo verbal de lo absoluto que prometían las vanguardias. "La expresividad sacralizada en el interior de su propia lógica" (García Montero) del absoluto poético de origen romántico no se muestra meramente superada en la charla de los ajados monstruos poéticos cernudianos, sino que se encarna en su misma tangibilidad temporal, en el sentido de una historicidad de la poesía que la reflexividad misma del poema no puede dejar afuera de su misma experiencia. La eticidad de la poesía cernudiana se juega, entonces, no tanto en la manera en que asimila "la dignidad de los sueños colectivos" en "el ejemplo individual" (García Montero) sino más bien en el modo en que es capaz de hacerse cargo de su propia historia. Una poesía que niegue unilateralmente, en nombre de la ´experiencia´, la memoria poética de las vanguardias, solo podrá hacer de esa experiencia una limitada y limitante celebración de la realidad tal cual es, y del lenguaje como herramienta idónea para su ´captación´. Si, en cambio, el clasicismo, la mesura y lo coloquial de la poesía madura de Cernuda pueden leerse como la voz aislada y resistente de esta sobre-vida del absoluto poético de herencia romántica, y como el testimonio del intento imposible, para la poesía del siglo XX, de sustraerse al influjo vanguardista, tal vez sostengan, en esa resistencia solitaria, la perduración posible -quizás ya no utópica, sino más bien elegíaca- de un ansia de transformación radical.