Mediación: el lugar del hombre en Eriúgena y Nicolás

NATALIA STROK

Nicolás de Cusa: identidad y alteridad. Pensamiento y diálogo

Biblos

Lugar: Buenos Aires; Año: 2010; p. 89 - 94

Nicolás de Cusa tuvo acceso a la obra de Juan Escoto Eriúgena, ya sea directamente o a través de la Clavis physicae de Honorius Augustodunensis. De hecho, nombra al filósofo del siglo IX en la Apologia doctae ignorantiae entre aquellos autores a los que se debería prestar atención. El hombre es creatura especial para estos dos exponentes del neoplatonismo cristiano medieval. Para uno y otro el dato bíblico de la creación a imagen y semejanza de Dios marca la diferencia con respecto al resto de las creaturas. Para Eriúgena el hombre es officina omnium por haber sido creado todo en él y responsable de la caída en el mundo material; para Nicolás es mensura rerum, la mens humana es unidad imagen de la unidad divina. En el presente trabajo se propone atender a ciertos puntos de conexión entre la concepción antropológica de estos dos autores, teniendo como horizonte los conceptos de identidad y alteridad.