BECAS
MAMBRIN Adriana Alejandra
capítulos de libros
Título:
Cora Gamarnik: El fotoperiodismo en los intersticios del poder
Autor/es:
BARRIOS CRISTALDO CLEOPATRA; MAMBRIN ADRIANA ALEJANDRA
Libro:
Mujeres de la Comunicación argentina
Editorial:
Fundación Friedrich Ebert
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2022; p. 5 - 378
Resumen:
Mujeres de la Comunicación en Argentina es una iniciativa que proviene delimprescindible camino que abrió el libro Mujeres de la comunicación (Rodríguez etal., 2020). En él se plasmaron las trayectorias, los recorridos, los pensares y los sentiresde veinte mujeres latinoamericanas del campo académico de la Comunicación. Supublicación estalló los sentidos de los relatos hegemónicos del campo y visibilizó lafuerza de sus producciones y el aporte que realizaron -y realizamos- a contrapelo dela historia. Su lectura no pudo más que abrir puertas y senderos que desandan unasnarrativas y construyen otras.A la luz de las urgencias por completar esas narrativas, el caso argentino se nos impusocomo tarea imperiosa, necesaria. La certeza de la fuerte presencia femenina en laconstitución del campo no hizo más que convertirse en un sólido argumento queposibilitó que nos sumemos al desafío de (re)construir la historia situada del modocomo se fue consolidando este espacio en Argentina.Nos enamoramos de la idea, y amamos fuertemente el proceso y el producto.Confesamos no ser las mismas personas que éramos cuando empezamos este camino.El recorrido nos trajo aprendizajes, redescubrimientos, nuevas lecturas, lecturas?viejas? resignificadas ante la presencia del nuevo mapa que se fue configurandofrente a nuestros ojos.Los primeros diálogos con Omar Rincón fueron esclarecedores y liberadores.Surgieron muchas ideas. Todo era posible, pero a la vez había que tomar decisionesque plasmaran nuestra idea del campo, de su historia, de sus facetas más visibles y,sobre todo, de aquellas menos visibles.Así, la idea de construir un libro federal, que intentara recorrer el territorio, fueuna de las primeras metas. Por eso optamos por poner en escena la construcciónrealizada por mujeres desde distintos lugares del país con aportes situados,altamente significativos.Se restringió la mirada al campo académico sin tener en cuenta, en esta instancia, a lasmujeres con destacadas trayectorias profesionales en el ámbito de la Comunicación.Sabemos que esta es una tensión constitutiva de la dupla comunicación/periodismoy no queremos generar aquí ningún debate más allá de la enunciación explícita delalcance y las limitaciones de este libro.Dentro del ámbito académico, se focalizó en la incidencia de las mujeres en tres grandesaspectos: sus aportes teórico-metodológicos al campo, su formación desde la docenciay la investigación y sus roles de gestión en ámbitos universitarios, que constituyeronimportantes lugares institucionales de construcción. Otro elemento que se tuvo encuenta para el armado del índice fueron las líneas de investigación y trabajo desplegadaspor las mujeres, con el objetivo de abarcar diferentes abordajes disciplinares que, en suconfluencia, constituyen al campo de la Comunicación en su diversidad.Al aspecto federal se le sumó una dimensión generacional. Los nombres que ibanemergiendo y que se imponían en su inevitabilidad fueron constituyendo dos grandessubconjuntos, a los cuales denominamos ?pioneras? y ?primeras graduadas?. El grupo?pioneras? reúne artículos sobre once mujeres que, a inicios de la década de lossetenta, comenzaron a gestar el campo académico de la Comunicación en Argentina,pero que debieron suspender la tarea por la irrupción de la última dictadura cívicomilitar en marzo de 1976. Se trata de las trayectorias de Silvia Delfino, Alicia Entel,Margarita Graziano, Mabel Grillo, Elena Maidana, Stella Martini, Nora Mazziotti, AnaMaría Nethol, Mabel Piccini, Ana Celina Puebla y Patricia Terrero.Por su parte, el grupo ?primeras graduadas? se compone de catorce artículos sobremujeres que, ya recuperada la democracia, resultaron las primeras graduadas de lasnuevas o renovadas carreras de Comunicación y Periodismo. Por lo tanto, tuvieronun rol protagónico en el despliegue y en la consolidación del campo académico dela Comunicación en Argentina. Se trata de los aportes de Mariana Baranchuk, Silvia Elizalde, Paulina Emanuelli, Patricia Fasano, Cora Gamarnik, Liliana Lizondo, LilaLuchessi, Sandra Massoni, Daniela Monje, Vanina Papalini, María Graciela Rodríguez,Marita Soto,1 Sandra Valdettaro y Claudia Villamayor.Consideramos que ninguno de los dos subconjuntos está saturado. Sin lugar a dudas,afloran otros nombres que podrían estar en este índice. El propósito de lograr un libroequilibrado en su representación federal e institucional, así como en el abordaje dediversas líneas disciplinares, nos llevó a definir una lista, desde luego incompleta.Este índice tampoco contiene la potencia de las mujeres que iniciaron sus carrerasde grado en los años noventa (entre las que nos contamos nosotras, las editoras),en pleno contexto de resistencia a la avanzada neoliberal, y que hoy tienen unlugar crecientemente protagónico en el despliegue del campo académico de laComunicación. Continuar dibujando la línea histórica que retrata la relevancia delas mujeres de la Comunicación en Argentina es un desafío que asumimos para unsegundo tomo de este libro.Una de las decisiones editoriales fuertes, a diferencia del libro latinoamericano quedio origen a la propuesta, fue que ninguna de las mujeres elegidas para constituireste índice escribiera sobre sí misma. Les propusimos a otras mujeres que lo hicieran,valorando esas miradas, esas lecturas, lo que cada una pudiera reponer de suencuentro con ellas, ya sea a través de los textos o de las charlas. Se plasman lashuellas que todas ellas fueron dejando en nosotras, que nos constituyen y que nospermiten narrarlas en el mismo acto que nos narramos.Así, nuevas mujeres se sumaron al libro, multiplicando las voces del campo tambiéndesde una mirada federal. Ellas son Melina Gaona, Laura Alonso, Adriana Ghitia,Eva Da Porta, María del Rosario Millán, Julieta Casini, Rosario Sánchez, AlejandraPía Nicolosi, Lucrecia Reta, Malvina Rodríguez, Carla Avendaño, Paula Navarro, AnaLaura Bustos, Sandra Buso, Flavia Costa, María Rosa Chachagua, Florencia Pannunzio,Eva Rodríguez Agüero, Beatriz Alem, Ianina Lois, Cleopatra Barrios, Adriana Mambrín,Magdalena Doyle, Mariana Ortega, Sandra Poliszuk, Teresita Vargas, Ornela Carboni,María Agustina Romero, Georgina Remondino, Alejandra Cebrelli, Lía Gómez, SusanaMartins y Tina Gardella.Además, la intención fue que las autoras de los capítulos no formaran parte delnúcleo más cercano de nuestras ?antologizadas? -término cariñoso con el cual lasnombramos durante todo el proceso-. A su vez, buscábamos que las autoras de lostextos tuvieran algo en común con las mujeres retratadas, buscando que la conexióngenerase alguna chispa. Pero no hubo chispa, sino fuego, producto de la pasión decada una de ellas y de esos cruces.En relación con la escritura de los textos, propusimos a las autoras la producción deensayos que recuperaran los principales aportes de las pioneras o de las primerasgraduadas al campo académico de la Comunicación desde una expresión libre,en diálogo con fragmentos biográficos, pero sin que los textos se restrinjan a unabiografía. Los límites para la extensión de los artículos fueron relativamente flexibles,lo que dio por resultado textos de variada cantidad de páginas. Se acordó el usodel lenguaje inclusivo, si bien no se definió cuál de todos sus modos actualmenteen uso, ya que culturalmente nos encontramos en un proceso abierto en torno deesta cuestión.Dos compañeras más fueron convocadas a sumarse desde roles específicos. MarianaSperoni realizó la curaduría de un dossier fotográfico sobre las ?antologizadas? yuno sobre las ?artesanas? (autoras, curadora, correctora y editoras) para la versióndigital del libro, generando dos bellas narrativas visuales. Dicho dossier complementasignificativamente el relato con fotos que nos hablan de las vidas, las militancias, lasamistades, los trabajos. Finalmente, Silvia Hernández intervino amorosamente en lostextos con criterios de corrección y estilo.Una vez que contamos con los capítulos revisados, nos contactamos con lasprotagonistas de cada capítulo para que pudieran leerlos y compartir sus pareceres,con la posibilidad de introducir alguna pequeña modificación en relación con datoso con algunos posicionamientos. Este ida y vuelta resultó altamente enriquecedorpara todas.Asimismo, se incorporaron a los capítulos dos colaboradores que contribuyeron a quelos relatos fueran posibles: Daniel Gimeno y Julián Mónaco, a quienes agradecemosel acompañamiento. También va nuestro agradecimiento a algunas compañerasconvocadas que, finalmente, por diversos motivos, no terminaron formando partede esta versión explícita del libro, si bien sus pasos por el proceso sin duda algunalo mejoraron. Ellas son July Cháneton, Paula Morabes, Analía Brandolín, NataliaAruguete y María Teresa Poccioni.Este es un libro colectivo, que comenzó con Clemencia Rodríguez, AmparoMarroquín, Claudia Magallanes Blanco, Omar Rincón y con todas las voces queaparecen en el libro latinoamericano Mujeres de la comunicación. Y continuó contodas estas voluntades que se fueron sumando para el capítulo argentino. Nosotraselegimos estar presentes y expresar nuestras propias voces desde el rol de editoras.Desde este lugar, nombramos el campo y sus presencias femeninas a partir denuestros pensares, haceres y sentires. Si bien las tres pertenecemos a una mismageneración, nuestras trayectorias y nuestras inscripciones institucionales diferencialesnos permitieron dar intensos debates que lograron resignificar nuestras posicionespara tomar decisiones conjuntas.