INVESTIGADORES
CHACANA Pablo Anibal
artículos
Título:
Tecnología IgY o aplicaciones de los anticuerpos de yema de huevo de gallina: biología, propiedades y su aplicación en medicina humana y veterinaria
Autor/es:
CHACANA, P. A.; TERZOLO, H. R.; GUTIERREZ CALZADO, E.; SCHADE, R.
Revista:
REVISTA DE MEDICINA VETERINARIA
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2004 vol. 85 p. 179 - 189
Resumen:
Los anticuerpos de yema de huevo son una interesante alternativa al uso de anticuerpos mamíferos. Hacia fines del siglo XVIII, el investigador alemán Klemperer demostró que extractos de yema de huevo obtenidos a partir de gallinas hiperinmunizadas contra la toxina tetánica, eran capaces de proteger a ratones inoculados con dosis letales de la misma toxina. La importancia de la Tecnología IgY fue tenida en cuanta recién durante las últimas décadas, y actualmente se publican constantemente trabajos sobre la inmunoglobulina, describiendo sus propiedades y aplicaciones en diferentes campos científicos. Estructuralmente, la IgY se compone de dos cadenas livianas y dos cadenas pesadas. Estas últimas contienen un dominio variable y cuatro dominios constantes. El peso molecular de la IgY es de alrededor de 167.250 Daltons. El punto isoeléctrico varía entre 5,7 y 7,6. La IgY se transfiere activamente desde la sangre a la yema, mediante un proceso donde estan involucrados receptores específicos. En general, las IgM e IgA se pueden encontrar en la clara del huevo, mientras que la IgY predomina en la yema, con concentraciones de entre 10 y 20 mg/mL. Existen diferentes métodos de precipitación y cromatográficos para la extracción de la IgY a partir de la yema del huevo. Comparada con la IgY mamífera, la IgY de los pollos presenta varias ventajas: es muy económica, se puede producir en grandes cantidades, se evita el sangrado del animal, do presenta reacciones cruzadas con los factores reumatoideos o los anticuerpos humanos anti-ratón, no activa el sistema de complemento mamífero, no interfieren con las heteroaglutininas humanas en la prueba de Coombs, presentan menor fluorescencia inespecífica en preparaciones inmunofluorescentes, etc. En muchos estudios, se ha demostrado que la IgY de pollo presenta afinidad y sensibilidad similares a las de la IgG mamífera. De hecho, puede ser usada en la mayoría de las pruebas de aglutinación. Además, debido a la distancia filogenética que separa a los mamíferos de las aves, la IgY de pollo puede reconocer proteínas mamíferas altamente conservadas, ó péptidos que serían indetectables utilizando conejos hiperinmunizados. Por esta razón, la IgY es muy útil en muchos tests de laboratorio en los que las IgG no es adecuada. Además, la IgY e pollo es particularmente útil como agente inmunoprofiláctico o inmunoterapéutico. Algunas de estas aplicaciones son la prevención y tratamiento de diarreas humanas y animales, caries, xenotransplantes, síndrome urémico hemolítico, fibrosis cística, elaboración de antitoxinas antivenenos, e incluso enfermedades infeccionas de peces.Aún queda por determinar si las formulaciones terapéutica e inmunoprofilácticas basadas en IgY (huevo en polvo, extractos de yema de huevo) son consideradas productos ó drogas medicinales que deben cumplir con todas las regulaciones pertinentes, o pueden ser consideradas como alimento funcional o aditivos alimentarios que pueden ser libremente usados, de manera más económica y sin la necesidad de registros especiales.