Elites urbanas en la temprana colonial. La configuración social de Jujuy a principios del siglo XVII

JUAN PABLO FERREIRO

Jahrbuch fur geschichte Lateinamerikas

Böhlau Verlag

Lugar: Köln; Año: 1996 p. 63 - 98

1438-4752

En la jurisdicci¢n de San Salvador de Jujuy, como en otros sitios de la Am?rica espa¤ola las v¡as del ascenso social, m s abiertas o m s restringidas de acuerdo a la coyuntura, son b sicamente el matrimonio ventajoso, habiendo partido, claro est , de una posici¢n de cierta expectaci¢n; la burocracia colonial, factor que ser importante en la ciudad reci?n a fines del siglo XVII; la posesi¢n de una s¢lida base econ¢mica desarrollada en el comercio, ya de productos de la tierra, o lo que es mucho mejor a£n, de ganado en pie y/o esclavos. Dejamos fuera de este esquema la posesi¢n de una merced de encomienda y la posesi¢n de tierras, ya que la primera no fue para Jujuy una v¡a, sino un requisito sine qua non de pertenencia a la ?lite; mientras la segunda tuvo relevancia, por lo menos hasta 1660, en la medida de su acceso a la mano de obra.El sistema familiar sobre el cual se apoya, se articula alrededor de la familia nuclear (en t?rminos legales), la que en realidad es un grupo dom?stico m s o menos extenso en funci¢n de su posici¢n social. Las caracter¡sticas que la animan fueron, la existencia de un principio de endogamia social preferencial; una regla residencial neolocal (aunque fuertemente matizada) y un principio de filiaci¢n aparentemente cogn tico. No obstante, as¡ como la regla de localidad presenta variaciones, tambi?n pueden ser halladas importantes matices al principio de filiaci¢n. Puede descubrirse, tambi?n, un funcionamiento en t?rminos de parentela, pero cuyo principio ordenador no va a establecerse s¢lo sobre el eje habitual colateral, sino sobre el reconocimiento de una ascendencia com£n y sobre la constituci¢n del grupo familiar alrededor de un patrimonio espec¡fico de bienes, territorios y s¡mbolos.La pr ctica hereditaria en la que se fundamentaba este tipo de organizaci¢n familiar correspond¡a a la vigente en el derecho castellano, y establec¡a la herencia divisible e igualitaria entre todos los herederos leg¡timos y la rigurosa exclusion de los descendientes naturales -a excepcion de que se les destinase parte de la herencia-. Este sistema de divisi¢n igualitaria representaba un peligro latente en el sistema de herencia, y pod¡a ser contrarrestado con estrategias que ten¡an por finalidad bloquear la divisi¢n patrimonial, en especial la propiedad territorial.Todos estos procesos se manifiestan en una fuerte y relativamente homogenea matriz ideol¢gica, que denominaremos ethos se¤orial-estamental, que a pesar de diferencias coyunturales, y aun estructurales pero en un plano local, provoca un sentimiento de profunda solidaridad intra-elite y a£n intra-clase. La manifestaci¢n a nivel de las alianzas matrimoniales de este fen¢meno es la denominada "endogamia de elite", cuya expresi¢n pol¡tica a nivel local ser n el nepotismo y el faccionalismo caudillesco