El CONICET lamenta el fallecimiento del Dr. Hugo Benjamín Nicolli



Fue investigador del CONICET por casi 40 años. Doctor en Ciencias Químicas, ha publicado más de 140 trabajos en congresos, simposios y revistas internacionales de alto impacto.

 

El Dr. Hugo Nicolli fue Investigador Principal del CONICET. Formó parte de la comunidad científica del Instituto de Geoquímica (INGEOQUI- Fuerza Aérea Argentina, Ministerio de Defensa) y del Centro de Investigaciones San Miguel.

Especialista en problemas de geoquímica ambiental y en procesos hidrogeoquímicos, el doctor consolidó una sólida experiencia en evaluación de fuentes y procesos de contaminación de aguas subterráneas.

Los aportes realizados por el Dr. Nicolli se centran esencialmente en estudios sobre la presencia de arsénico en aguas, principalmente en la llanura Chaco-pampeana, donde el elemento se encuentra habitualmente acompañado por otros contaminantes.

En 2011 la oficina Brasilia de la UNESCO le otorgó el premio MERCOSUR en Ciencia y Tecnología, por su participación en un trabajo sobre problemas de arsénico en países del MERCOSUR con aportes y soluciones originales.

En 2014, presidió de forma honoraria el 5º. Congreso Internacional de Arsénico en el Ambiente, en Buenos Aires, en el marco del centenario del descubrimiento del HACER (Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico) en América. El congreso fue declarado de interés nacional y parlamentario.

Fue revisor científico de artículos enviados para su publicación en revistas especializadas de editoras de Alemania, Holanda y Estados Unidos. También participó de la RSA (Red de Salud Alimentaria) del CONICET.

El Dr. Nicolli obtuvo su licenciatura en geología por la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), años más tarde se doctoró en Ciencias Químicas en la Universidad de Salamanca (USAL). Durante su trayectoria participó de la escritura de libros, capítulos de libros, congresos y numerosos trabajos en revistas especializadas de primer nivel.

“Queremos destacar, además, la hombría de bien del Dr. Nicolli, su dedicación al trabajo y la enorme cantidad de campañas realizadas en nuestro país, estudiando la localización, distribución y origen del arsénico en aguas subterráneas. Pero, sobre todo, queremos mencionar su afabilidad en el trato, que se manifestó a través de almuerzos, cenas y reuniones compartidas”, destaca su colega y amiga la Dra. María Litter, investigadora superior ad-honorem del CONICET.