El CONICET lamenta el fallecimiento de Eduardo Alberto Castro
Fue director del Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas entre 2003 y 2009. También se desarrolló como investigador del CONICET en el INIFTA y el Centro de Química Inorgánica “Dr. Pedro J. Aymonino” (CEQUINOR, CONICET-UNLP-asociado a CICPBA).
El investigador del CONICET en el INIFTA Pablo Duchowicz lamenta su partida y lo recuerda con las siguientes palabras:
La actividad académica y profesional realizada por Eduardo Castro es muy amplia y reconocida en el ambiente de la Química, en donde se destaca por su gran capacidad de trabajo, esfuerzo personal propio, y dedicación a la Ciencia a pleno.
Miembro de la Carrera del Investigador de CONICET a partir de 1974 en la División Química Teórica de INIFTA, alcanzó la jerarquía de Investigador Superior 25 años más tarde en 1999. Desarrolló tareas de investigación en el INIFTA hasta el año 1992, y posteriormente en el CEQUINOR hasta el 2003. A partir desde ese entonces regresa al INIFTA como investigador y director de nuestra institución entre 2003 y 2009. La gestión de Eduardo en el INIFTA se dedicó con todas sus fuerzas a incorporar investigadores y becarios jóvenes, desarrollar nuevas áreas de investigación, ampliar los espacios, y promover la construcción de nuevos laboratorios, en línea con las ideas de los Prof. Dr. Hans H. Schumacher y del Dr. Alejandro J. Arvia.
En su especialidad, Eduardo se distinguió siempre por impulsar el desarrollo de las actividades de químicos teóricos y computacionales de expresión latina a través de sus escuelas y congresos, y de la difusión de este campo de la Química en nuestro país y en otros países de Latinoamérica.
Además de desenvolverse como un destacado presidente de la Asociación Química Argentina (AQA) y de la Sociedad Científica Argentina (SCA), fue también uno de los socios fundadores de la Asociación Argentina de Investigación Fisicoquímica y su primer secretario (1978-1983).
Finalizados sus estudios secundarios con el título de Técnico Químico (1962), Eduardo ingresó a la Facultad de Química y Farmacia de La Plata donde en 1970 se recibe como Licenciado en Ciencias Químicas (Orientación Fisicoquímica). Dos años después alcanza el grado de Doctor en Ciencias Químicas (Orientación Fisicoquímica) con su trabajo de tesis: “Aplicación de la teoría de orbitales moleculares al beta-caroteno (a) Comparación de métodos semiempíricos (b) Cálculo del espectro electrónico y fuerza de oscilador”, desarrollado bajo la dirección del Prof. Dr. Oscar Manuel Sorarrain en el Departamento de Física.
En materia de docencia universitaria, inició en 1967 como docente en el Departamento de Matemática, y desde entonces estuvo activo en el dictado de los cursos de Química Analítica, Fisicoquímica II y Química Teórica y Computacional. Formó numerosos profesionales y estudiantes de posgrado no sólo de nuestra universidad sino también de otras universidades del país y del exterior. En la enseñanza, volcó también su interés y compromiso en la educación en Ciencias Químicas en todos sus niveles.
Eduardo recibió a lo largo de su trayectoria profesional diferentes premios, pudiendo citarse el Premio KONEX (2003) en Ciencia y Tecnología, Premio Bernardo Houssay (1987) en Ciencias Físicas otorgado por CONICET, Premio Dr. Rafael Labriola (1988) otorgado por AQA, Premio Horacio Damianovich (1996) de la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales en Química Teórica, o Hans J. Schumacher a la Trayectoria en el campo de la Fisicoquímica otorgado por AQA (2007). En la Academia Belgraniana de Historia (2002) fue designado académico plenario.
Docente-investigador valuable formador de recursos humanos, fue director de más de 40 tesis doctorales de egresados de universidades nacionales y regionales, muchos de sus discípulos que lo recuerdan ocupan actualmente diversos puestos en laboratorios a nivel mundial. Su primer tesista es el famoso y renombrado Prof. Dr. Francisco M. Fernández, quien dirige actualmente el grupo de investigación Estudio Teórico de Sistemas Químicos, Físicos y Biológicos del INIFTA.
Eduardo fue también muy conocido a nivel internacional por su manera dinámica e ininterrumpida de publicar sus trabajos de investigación: publicó más de 600 trabajos de investigación originales en el campo de la Química Teórica y Fisicomatemáticas en revistas de prestigio internacional, más de 70 artículos educativos, más de 200 trabajos de divulgación científica importantes de las ideas de la Química Teórica en Latinoamérica, así como numerosas presentaciones a congresos nacionales e internacionales. Escribió medio centenar de textos en colaboración cubriendo distintos aspectos de la disciplina. Fruto de su producción científica, fue incluido en el registro de los químicos más citados del mundo durante el período 1981-1997, fuente: Institute of Scientific Information (ISI), Philadelphia, USA (10.858 científicos citados al menos 500 veces en este período en publicaciones internacionales con arbitraje científico) donde figuraban sólo 9 químicos argentinos residentes en el país.
Su arte de madrugar para iniciar las actividades desde temprano y puntualidad en el transcurso de las horas del día, amante del deporte en general y del tenis en particular, y cuyas cualidades y costumbres fueron el ser una persona brillante, muy compañera, consejera y amiga, de gran sentido común y buen humor. ¡¡Hasta siempre Eduardo!!