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Balance de la Red de Evaluación y Monitoreo de Ecosistemas Acuáticos
Durante el encuentro de la Red creada por el CONICET y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación se repasaron logros y desafíos.
En la Sala Directorio del CONICET se realizó un encuentro de la Red de Evaluación y Monitoreo de Ecosistemas Acuáticos (REM.AQUA) creada en 2019 por el Consejo y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación (MAyDS). La Red ha venido trabajando con el objetivo de contribuir a la gestión y conservación de los distintos tipos de ecosistemas acuáticos existentes en las diversas regiones del país a partir del abordaje de cuatro líneas de trabajo: biomonitores; calidad del agua y niveles guía; régimen hidrológico y caudal ambiental y servicios ecosistémicos.
Del evento participó la presidenta del Consejo Ana Franchi quien agradeció a los investigadores e investigadoras que integran la Red por el compromiso con la protección de los ecosistemas acuáticos y resaltó los avances del trabajo técnico de los diversos grupos de investigación. “La innovación en los temas que se planteó atender la Red, fortalecen la capacidad del Consejo de ser una herramienta para el Estado. La difusión del material resultante del trabajo en conjunto con ministerios y secretarías debe ser fundamental y permanente”, sostuvo Franchi.
Por su parte, la investigadora del CONICET en el Instituto de Limnología “Dr. Raúl A. Ringuelet” (ILPLA, CONICET-UNLP) y coordinadora científica de la Red Nora Gómez explica: “El objetivo de la creación de la REM-AQUA, una de las Redes Institucionales Orientadas a la Solución de Problemas (RIOSP) las cuales dependen de la Gerencia de Desarrollo Científico y Tecnológico del CONICET, fue diagnosticar los ecosistemas acuáticos de Argentina desde una mirada integradora, como la que propone el concepto de integridad ecológica. Esto significa un abordaje poco empleado en nuestro país, aunque ampliamente aceptado a nivel mundial. Hoy por hoy no podemos conformarnos con caracterizar los cuerpos de aguas con sólo datos físicos-químicos, necesitamos además saber sobre la calidad de la biota y del hábitat para así comprender de manera integral lo que les sucede”.
Y continúa: “A lo largo de estos años de funcionamiento de la Red fuimos descubriendo el interés de los distintos organismos de gestión del país en adoptar herramientas que les permitieran avanzar en un mejorar el diagnóstico de los distintos cuerpos de agua a través de abordajes holísticos. La tarea realizada fue intensa atravesando distintas etapas, entre ellas acordar marcos conceptuales que se adaptaran a las distintas particularidades de muestreos cuerpos de agua y de las ecorregiones que los contienen, para luego pasar a identificar las herramientas necesarias para diagnosticarlos y monitorearlos. El desarrollo de encuentros de los cuatros grupo que conforman la red, la realización de talleres con gestores, cursos de capacitación, informes técnicos, publicaciones, protocolos y la participación en distintos tipos de reuniones científico-técnicas fueron algunos de los vehículos para comenzar a transferir la tarea que comenzó a principios del 2019”.
Entre los resultados alcanzados se encuentran las bases para establecer valores guía de calidad del agua para la protección de la vida acuática, determinar las condiciones hidrológicas y regímenes de caudales ambientales para la conservación de los ecosistemas acuáticos; también evaluar los servicios ecosistémicos que éstos brindan a la sociedad y abordar la evaluación de los ecosistemas acuáticos incorporando la utilización de biomonitores. “Sin lugar a duda esto fue posible gracias a la excelente disposición de más de un centenar de profesionales de todo el país, provenientes de universidades, unidades ejecutoras, organismos de gestión nacionales y provinciales, incluidos los cuadros técnicos del MAyDS. La tarea no fue fácil ya que tuvimos que superar el escollo que significaron los dos años de pandemia. Esto implicó redoblar los esfuerzos para alcanzar las metas comprometidas en tiempo y forma y realizar un aporte significativo para la conservación de los ecosistemas acuáticos del país, con consensos entre el ámbito académico y de la gestión”, sostiene la investigadora.
Durante el evento, especialistas realizaron una breve reseña de la creación de la Red, su estructura y desafíos. Además, se llevaron adelante exposiciones sobre: Calidad del agua y niveles guía; Régimen hidrológico y Caudales ambientales; Servicios Ecosistémicos y Biomonitores.
Técnicas de monitoreo para ecosistemas fluviales de la Argentina
Luego de que en 2020, se publicara el libro titulado “La bioindicación en el monitoreo y evaluación de los sistemas fluviales de la Argentina. Bases para el análisis de la integridad ecológica” se reconoció la necesidad de contar con un manual que comprendiera las “Técnicas de monitoreo para ecosistemas fluviales de la Argentina” dirigido a explicar las metodologías requeridas para el biomonitoreo de ecosistemas fluviales de Argentina atendiendo las particularidades de las distintas regiones del país y focalizando el interés en los grupos de organismos frecuentemente utilizados en la evaluación y monitoreo de ríos y arroyos.
Este manual metodológico es el resultado de la colaboración de 46 autores/as de distintas partes del país y de la interacción entre el CONICET y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, a través de la RIOSP.
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