NOTICIAS INSTITUCIONALES

Al cuidado de la salud

El CONICET colaboró con una iniciativa mundial para el relevamiento de casos de enfermedad causada por Eschericia coli productor de toxina Shiga, sus reservorios y vías de transmisión.



A través de su Red de Seguridad Alimentaria (RSA), el CONICET participó de una convocatoria de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el relevamiento de información sobre la bacteria Escherichia coli productor de toxina Shiga (STEC), que se transmite a través de alimentos contaminados.

Si bien E. coli se puede encontrar comúnmente en el tracto digestivo de humanos y animales, las cepas que producen esta toxina pueden causar cuadros de infección con diarrea de moderada a severa, cólicos abdominales, vómitos y otros síntomas gastrointestinales. En sus formas más severas pueden llevar al desarrollo de Síndrome Urémico Hemolítico (SUH), que se caracteriza por insuficiencia renal aguda, anemia hemolítica – es decir con destrucción de los glóbulos rojos -, y disminución de los niveles de plaquetas, y puede llevar a la muerte.

A través de su Comité Asesor Permanente, la RSA recibió la solicitud de la FAO/OMS para colaborar con el aporte de información sobre esta bacteria en Argentina. Por ello la RSA convocó la conformación de un grupo ad hoc integrado por investigadores de CONICET y de Universidades para trabajar la temática junto a representantes de instituciones que conforman el Comité Asesor Permanente de la RSA. El objetivo fue recopilar y sistematizar información sobre este grupo bacteriano en la Argentina, especialmente sobre aspectos vinculados a los animales – reservorio – y a los alimentos que pueden vehiculizarlo.

El grupo de trabajo fue integrado por 21 investigadores y referentes en el tema del CONICET, el INTA, la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires, la Universidad Nacional de La Plata, la Universidad Nacional de Entre Ríos, el SENASA, la Dirección General de Higiene y Seguridad Alimentaria de la CABA y el IPCVA.

El informe final fue elevado a la Coordinación de Vigilancia y Alerta de Residuos y Contaminantes (COVARC) de la Secretaria del Comité de Higiene de Alimentos (CCFH) del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), que a su vez lo enviará a los organismos internacionales solicitantes.

 

La Red de Seguridad Alimentaria del CONICET fue recientemente incorporada a la Comisión Nacional de Alimentos (CONAL), el organismo técnico que se encarga de las tareas de asesoramiento, apoyo y seguimiento del Sistema Nacional de Control de Alimentos.La CONAL está conformada por el Ministerio de Salud y Acción Social, el Ministerio de Agroindustria, la Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, el SENASA, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y representantes de los ministerios de salud y producción de las provincias.

Con esta incorporación del CONICET, se encuentra representado el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva dentro de la CONAL.

El Comité Asesor Permanente de la Red de Seguridad Alimentaria está conformado por representantes de los siguientes organismos: Dirección General de Higiene y Seguridad Alimentaria del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires; Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL); Ministerio de Agroindustria de la Nación; SENASA; Ministerio de Salud de la Nación; Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA); Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).