Achieving Sustainability through Sanctuaries. Seabirds and Marine Protected Areas.

GARCÍA BORBOROGLU, PABLO

Nueva York

Simposio; United Nations One Ocean High Level Symposium. Marzo 2015.; 2015

Sede de las Naciones Unidas en Nueva York, Estados Unidos.

El pasado 25 de septiembre, los 193 países miembro de la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptaron los nuevos Objetivos de Desarrollo Sustentable (SDG), según su sigla en inglés ?Sustainable Development Goals?. Se trata de un set de 17 objetivos intergubernamentales relacionados con el desarrollo internacional. Incluyen políticas para reducir la pobreza y el hambre, mejorar la educacion y la salud, planificar las ciudades de modo más sustentable, combatir el cambio climático y mejorar la protección de bosques y océanos. En particular, el Dr. Garcia Borboroglu, investigador de CONICET y Presidente de Global Penguin Society?, fue parte del grupo que trabajo en el objetivo 14 de esta agenda, vinculado a la conservación y uso sostenible de los océanos, los mares y los recursos marinos. La agenda menciona que ?Los océanos del mundo, su temperatura, química, corrientes y la vida que alberga, hacen que el planeta Tierra sea habitable para la humanidad. El agua de lluvia, el agua potable, el clima, las costas, gran parte de nuestros alimentos e inclusive el oxígeno que respiramos, son en gran medida provistos y regulados por el mar. A lo largo de la historia, los océanos y mares han sido vías vitales también para el comercio y el transporte. El manejo cuidadoso de este recurso esencial global es una cuestión clave para un futuro sustentable (http://www.un.org/sustainabledevelopment/oceans/). Como parte de esta iniciativa, el investigador también diserto en el simposio de alto nivel: UN OCEANO, sustentabilidad a través de santuarios marinos, que tuvo lugar en la Sede Central de Las Naciones Unidas en Nueva York, en marzo de 2015. Su presentación mostro como los santuarios son necesarios para proteger las aves marinas y otra fauna marina, las razones ecológicas y económicas para crear áreas marinas protegidas y porque la ciencia es fundamental para optimizar su diseño. Dicho simposio buscaba comprometer a los países miembros de Naciones Unidas a incrementar y mejorar la protección del océano, lo cual se logró el pasado viernes mediante la adhesión masiva a la nueva agenda 2030.