Erase una vez en Jujuy...

DR. JUAN PABLO FERREIRO

S. S. de Jujuy

Congreso; Precongreso argentino de Cs. Soc. Region Norte Grande; 2023

CLACSO-SPU-UNJU

Por Res. FH 436/17 se creó el LIDEPROJ, como equipo de investigación, intervención y formación y como una primera forma de respuesta de la FHyCS/UNJU a todas estas vacancias. Dos años después, en 2019, el laboratorio comenzó a ser convocado por la justicia federal jujeña para participar en inspecciones oculares, lo que devino en nuestra vinculación como peritos en causas de violaciones a los DDHH. En junio de 2020 formalizamos nuestro vínculo pericial con la justicia federal, que poco tiempo después se materializaría en un convenio entre la UNJu y el Poder Judicial de la Nación, marco actual dentro del cual desempeñamos nuestras tareas.El grupo inicial, para ese momento, había crecido nutriéndose con jóvenes graduadxs y estudiantes avanzadxs, a los que los más antiguos en el grupo transmitíamos nuestras diversas experticias, todas provenientes de campos ajenos al quehacer judicial. Decidimos, dado nuestro crecimiento y posibilidades, conformar tres equipos de trabajo convergentes. Uno, el de búsqueda y análisis documental, dirigido por miembros que poseían antecedentes y experiencia en trabajos de archivos y análisis de redes sociales -todxs provenientes de la Antropología Social-, estaba destinado a proveer de hipótesis de trabajo testimoniales a los otros dos. Otro, se organizó alrededor de las tareas etnográficas de campo orientadas por el anterior -también antropólogxs sociales-. Rápidamente, éste se constituyó a su vez en otro generador de hipótesis de trabajo, que permitían chequear, enriqueciendo o alternativizando lo propuesto por el equipo encargado de la exploración testimonial. El tercero, fuertemente asociado a los dos anteriores implicó una apuesta más fuerte, ya que estaba constituido por arqueólogxs, y no teníamos, salvo unas pocas excepciones puntuales, experiencia previa en colaboración e interdependencia entre estas prácticas subdisciplinares. Aquí se sumaron, además, docentes investigadorxs especializadxs en bioantropología. Esto hizo que nuestra experiencia fuese novedosa en todo sentido, no sólo estábamos incursionando en temáticas nuevas y que nos llevaban mucho más allá de lo estrictamente académico, sino también en formas de trabajo y cooperación a una escala que no registraba antecedentes en nuestra facultad ni en nuestra universidad y, además, lo hacíamos en un contexto cuyos códigos y pautas también eran nuevos, dada la multidisciplinariedad en la que participábamos.