INVESTIGADORES
DARDANELLI Sebastian
capítulos de libros
Título:
Introduction to the singularities of the Magellanic sub-Antarctic avifauna. Pp. 131-133, in: Magellanic Sub-Antarctic Ornithology: First Decade of Long-Term Bird Studies at the Omora Ethnobotanical Park, Cape Horn Biosphere Reserve, Chile. Rozzi & Jiménez
Autor/es:
DARDANELLI, S., JIMÉNEZ, J., R. VÁZQUEZ & C. ELPHICK.
Libro:
Magellanic Sub-Antarctic Ornithology: First Decade of Long-Term Bird Studies at the Omora Ethnobotanical Park, Cape Horn Biosphere Reserve, Chile.
Editorial:
University of North Texas Press
Referencias:
Lugar: North Texas; Año: 2014; p. 1 - 364
Resumen:
El estudio sobre aspectos de la biología básica de las especies aporta valiosa información para el desarrollo de estrategias de conservación de las mismas y sus hábitats, así como para generar vínculos entre el ser humano y estas especies. Diversos autores (Soule & Kohn 1988, Primack 1993, Wiens 2007) resaltan que la piedra fundamental del desarrollo de cualquier programa de conservación de especies y/o sus hábitats, es el conocimiento de su biología básica. Este aspecto es primordial, dado que las respuestas de cada especie a determinados procesos como pérdida de hábitat y cambio climático son siempre ?especie-específicas? (Lindenmayer y Fischer 2006). Además, algunas especies del hemisferio sur, particularmente paseriformes de familias sub-estudiadas del neo-trópico que habitan hasta zonas sub-antárticas (i.e., altas latitudes del hemisferio sur), como por ejemplo, varias especies de las familia Furnariidae y Tyrannidae entre otras, presentan características biológicas únicas y/o muy diferentes de especies de paseriformes que habitan a altas latitudes del hemisferio norte (véase e.g. Moreno et al. 2005, Moreno et al. 2007). La Reserva de Biósfera Cabo de Hornos (RBCH) alberga los bosques más australes del planeta, donde las aves son el grupo dominante de vertebrados. Por eso el Parque Omora priorizó el estudio a largo plazo de aves en la RBCH, desarrollando desde el año 2000 un programa de monitoreo de aves terrestres. El programa consiste en el anillamiento de individuos en bosques y matorral, así como el seguimiento de la dinámica poblacional a través de la implementación de puntos fijos de captura, recaptura y liberación. A través del análisis de los resultados de este programa de anillamiento se ha podido empezar a conocer aspectos básicos de la ecología de las casi desconocidas especies que habitan los bosques subantárticos. En este capítulo se presentan cinco artículos publicados en diferentes revistas entre los años 2004 y 2008, que tratan sobre aspectos muy diversos de la biología básica de las aves subantárticas, desde autoecología, comportamiento y patrones migratorios, hasta el estudio de gradientes latitudinales de sus parásitos sanguíneos. Esta variedad de artículos ha sido reunida en un mismo capítulo enmarcado como ?singularidades?.     Existe una marcada asimetría entre el conocimiento sobre la existencia de gradientes latitudinales de diversidad de especies entre los organismos de vida libre y sus parásitos, con muchos estudios para los primeros y escasez de estudios sobre los últimos (Hillebrand et al. 2001).  Esta falta de estudios en gradientes latitudinales de parásitos es aún más marcada en el hemisferio sur (Merino et al. 2008). En el primer trabajo de este capítulo,  Merino et al. (2008) aporta valiosa información sobre los gradientes latitudinales de riqueza y abundancia de linajes de parásitos sanguíneos de aves. Los autores describen gradientes latitudinales para la prevalencia de los tres géneros de parásitos estudiados (Leucocytozoon, Haemoproteus y Plasmodium) así como para  infecciones mixtas, y a la vez sugieren que algunos linajes habrían evolucionado aisladamente en algunas localidades y/o especies. Es destacable que  el género Haemoproteus resulto siempre huésped de aves de la familia Emberizidae. Individuos de ?fío-fío? (Elaenia albiceps), una especie migratoria de larga distancia, se encontraron infectados por los mismos linajes de parásitos en localidades separadas por 20° de latitud. Infecciones por estos linajes fueron registradas en otras especies no migratorias, por lo que los autores sugieren que las aves migratorias de larga distancia podrían distorsionar los gradientes latitudinales de parasitismo debido al papel potencial de dichas aves migratorias en la propagación de enfermedades a otras especies. Este estudio de Merino et al. (2008) contribuyó en el desarrollo de marcadores específicos para la amplificación y detección molecular de dichos grupos de parásitos (véase Martínez et al. 2009). Estudios sobre autoecología de las especies de aves son esenciales para conocer las especies y conservarlas y conservar los ecosistemas donde habitan (Lindenmayer y Fischer 2006, Wiens 2007). El segundo artículo de este capítulo (Brown et al. 2007) trata sobre el estudio de la autoecología de E. albiceps. Los autores nos ayudan a comprender más sobre una especie migratoria que se reproduce en los bosques y matorrales subtropicales y templados del sur de Sudamérica e inverna en los bosques tropicales del norte de Sudamérica. En este trabajo se recoge valiosa información sobre la longevidad de E. albiceps, información que es posible de obtener a partir de estudios a largo plazo. Existe un desconocimiento generalizado sobre la longevidad de las aves silvestres en libertad, particularmente en el hemisferio sur; esta información es relevante para conocer la historia de vida de una especie, modelar la dinámica de las poblaciones en el tiempo. De esta forma, es posible predecir el comportamiento poblacional frente a alteraciones como degradación del hábitat o cambio climático. Datos no publicados de Dardanelli et al. (en prep.) extienden la longevidad de E. albiceps en dos años (hasta un máximo de 10 años). Además de contribuir al conocimiento de la autoecología de las especies, el registro de las fechas de arribo y partida de los individuos de E. albiceps a la isla Navarino, sirven para detectar cambios marcados en la fenología de migración, que pueden ser utilizados como indicadores de cambios asociados al cambio climático. Por ejemplo, algunos migrantes adelantan o retardan su partida y su llegada como una respuesta al cambios en los regimenes de lluvias y temperatura (Jenni y Kéry 2003, Both 2010).  Desde el año 2004 se comenzó un programa de monitoreo de la biología reproductiva de aves que nidifican en cavidades. Este estudio fue realizado mediante la instalación de cajas anideras en sectores del Parque Omora y zonas aledañas y está vinculada con investigaciones iniciadas previamente en Chiloé (véase Moreno et al. 2005). Las especies que predominantemente han utilizado las cajas anideras en Navarino son el chercán (Troglodytes aedon) y el rayadito (Aphrastura spinicauda). Esta última especie, miembro de la familia Furnariidae, ha resultado ser una especie particularmente interesante por ser abundante en los bosques templados y por poseer carácterísticas singulares en dimorfismo sexual y comportamiento reproductivo. El tercer trabajo de esta recopilación corresponde a Moreno et al. (2007), donde se estudiaron aspectos del dimorfismo sexual y cuidado parental del rayadito en Chiloé y Navarino. Los autores muestran que machos y hembras son morfológicamente similares,  diferenciándose únicamente en tamaño corporal, siendo los machos 2-10% más grandes que las hembras. Además, el cuidado parental de huevos y pollos es, en general compartido por machos y hembras adultas, colaborando ambos en la incubación, alimentación y limpieza de los nidos. Este tipo de cuidado biparental, asociado a otros aspectos característicos propias de la especie en estas latitudes, como son la baja fecundidad anual, gran tamaño de sus huevos en relación a otros paseriformes y el prolongado periodo de crecimiento (Moreno et al. 2005), sugieren que el rayadito es una especie singular que amerita mayores investigaciones sobre diversos aspectos de su biología. El cuarto trabajo de este capítulo también trata sobre una especie migratoria, aunque de corta distancia, de distribución mucho más restringida y de menor abundancia. McGehee et al. (2004) reportan el registro de la ?viudita? (Colorhampus parvirostris) para la isla Navarino. Adicionalmente, los autores analizan su presencia en estas altas latitudes entre los meses de marzo y abril, correspondiente al periodo post reproductivo de la especie. Los autores plantean una interesante discusión sobre el registro de C. parvirotris en la región de Cabo de Hornos, sugiriendo que esta especie habría ampliado, en años recientes, su rango de distribución al sur lo cual podría estar asociado al fenómeno de cambio climático. Por otra parte, considerando que fueron avistadas después de su periodo reproductivo, plantean que su presencia austral podría deberse a una migración corta hacia latitudes altas antes de iniciar nuevamente la migración hacia el norte, lo cual es llamado ?migración reversa post-reproductiva?. Este sería el primer caso reportado para los bosques subantárticos. No obstante, cabe mencionar que con posterioridad a la publicación de este estudio, se pudo registrar la presencia de C. parvirostris durante casi todo el año, excepto octubre-diciembre (Ippi et al. 2009, S. Dardanelli, observación personal). Lo que hace pensar que algunos individuos estarían comportándose como residentes y otros como migratorios. Frente a esta evidencia C. parvirostris tendría una población parcialmente migratoria. Esta podría ser una estrategia nueva adquirida por la población presente en isla Navarino, o simplemente dado la rareza de la especie en todo su rango de distribución, la población de Navarino no había sido detectada fuera del otoño antes del año 2004. Estas nuevas preguntas alientan la formulación de nuevos estudios para confirmar, por ejemplo, la nidificación de la especie en los bosques más australes. Las lechuzas del genero Strix habitan principalmente bosques en todos los continentes excepto la Antártica (del Hoyo et al. 1999). Su afinidad por los ambientes boscosos y su frecuente sensibilidad a las alteraciones de los mismos las convierte en buenas indicadoras de la salud ambiental de bosques y a la disponibilidad de presas en los mismos. El caso más conocido es el de la lechuza manchada del norte (Strix occidentalis caurina) de los bosques del noroeste de Estados Unidos (Hunter y Gibbs 2007). En el quinto y último trabajo de este capítulo Ippi y Rozzi (2004)  aportan datos relevantes sobre el ?concon? Strix rufipes, una lechuza de grandes dimensiones (38 cm de longitud corporal) endémica de los bosques templados de Chile y Argentina. A pesar de ser una lechuza considerada crepuscular o nocturna, los autores han revelado la actividad diurna de esta especie, registrada  durante el día. Esta especie fue registrada no solo desplazándose dentro del bosque, sino también cazando durante el día. También son notables las observaciones realizadas sobre su conducta alimentaria, encontrándose entre sus presas pequeñas aves. Estos hechos fueron nuevamente constatados con posterioridad a la publicación a través de observaciones diurnas de actividad de varios individuos en la isla y la captura de dos individuos que intentaron cazar aves pequeñas atrapadas en las redes de neblina, durante el monitoreo mensual de largo plazo en el Parque Omora (S. Dardanelli, observación personal). En síntesis, el estudio de estas singularidades de la avifauna subantártica aporta información valiosa que ayuda a conocer la casi inexplorada biología básica de sus especies. El valor de este tipo de datos adquiere aún mayor relevancia si se considera que, en análisis con grandes bases de datos comparando diversos taxa, se encontró que las aves fueron el grupo taxonómico que mejor se desempeñó como indicador biológico, a la vez que involucró el menor costo de monitoreo (Gardner et al. 2008). El conocimiento de la biología de las aves subantárticas es fundamental para el desarrollo de estrategias de conservación de las mismas y de sus hábitats. Además la comunicación a la sociedad de sus características más notables, potencian el acercamiento de los habitantes humanos con las aves y sus hábitats. La vigencia del programa de anillamiento y más recientemente el seguimiento reproductivo en cajas anideras a largo plazo del Parque Omora garantiza una línea de continuidad en el estudio de estos aspectos fundamentales de la avifauna de los bosques más australes del planeta. Hacia el futuro existe una infinidad de posibilidades y necesidades de seguir explorando las ?singularidades? de la avifauna subantártica. En este sentido estudios en curso sobre el carpintero negro (Campephilus magellanicus), la especie más carismática de los bosques de la RBCH (Arango et al. 2007), prometen seguir develando singularidades de fundamental importancia, para ayudarnos a entender, valorar, disfrutar y conservar la avifauna subantártica.