Reconceiving the biological invasion of North American beavers (Castor canadensis) in southern Patagonia as a socio-ecological problem: implications and opportunities for research and management

ANDERSON, CHRISTOPHER B; PIZARRO, J CRISTÓBAL; VALENZUELA, ALEJANDRO; ADER, NATALIA; BALLARI, SEBASTIÁN; JOSÉ LUIS CABELLO CABALÍN; DICENTA, MARA; NIELSEN, ERIK; ROULIER, CATHERINE; VAN AERT, PETER

Biological Invasions in the South American Anthropocene: Global Causes and Local Impacts

Springer

Año: 2021; p. 231 - 255

En las últimas décadas, los científicos naturales y los administradores de recursos naturales han llegado a reconocer que los problemas ambientales tienen causas y consecuencias que son tanto ecológicas como sociales (Carpenter et al. 2009). Por ejemplo, como disciplina académica, la ecología reconoce cada vez más que los ecosistemas no solo están compuestos de elementos bióticos y abióticos, sino también que los humanos forman parte integral de lo que aparentemente son sistemas socioecológicos (Pickett y Ostfeld 1995; Anderson et al. 2015a). Como resultado, se están haciendo esfuerzos para ampliar las formas en que los problemas, como las invasiones biológicas, la restauración ecológica o la conservación de la biodiversidad, se estudian y gestionan para abordarlos no solo como sistemas ecológicos, sino también como su dominio social y dimensiones humanas (Collins et al. 2011; Díaz et al. 2015; Pascual et al. 2017). Sin embargo, aún queda mucho trabajo por hacer para lograr este objetivo. Por ejemplo, los estudios sobre especies exóticas invasoras tienen un claro sesgo biológico a nivel nacional en Chile (Quiroz et al. 2009), a escala regional en la Patagonia (Anderson y Valenzuela 2014) y el Cono Sur (Ballari et al. 2016), en todo el continente latinoamericano (Pauchard et al. 2011) e incluso a nivel mundial (Estévez et al. 2015; Vaz et al. 2017). Por lo tanto, la relativa escasez de estudios interdisciplinarios, aplicados y sociales sobre las invasiones biológicas explica por qué continúan aumentando y actualmente constituye una barrera para abordarlo como un problema socioecológico.