La Naturaleza ante el hombre: el bosque y su representación como espacio de la aventura y el amor

ASISS GONZALEZ, FEDERICO JAVIER

San Juan

Encuentro; TERCER ENCUENTRO DE JÓVENES INVESTIGADORES 2014; 2014

Universidad Nacional de San Juan-Universidad Católica de Cuyo-Gobierno de la Provincia de San Juan

Lo real y lo imaginario son construcciones conceptuales separadas por una tenue y oscilante linea de enorme porosidad. Aun tomando como premisa que la realidad tiene una existencia independiente del hombre que la conoce, éste nunca tendrá un acceso directo a ella. En consecuencia , toda conceptualización de la realidad estará siempre basada en una experiencia mediada por los sentidos y, sobre todo, por la cultura que actúa como filtro y decodificador de los estímulos externos. Es por ello que, cuando el ser humano habla de su entorno lo hace de sí mismo, de su cultura y de la sociedad en que se ha formado. En consecuencia, el ser humano discursiviza su entorno para comprenderlo y aprehenderlo, lo cristaliza en representaciones socialmente aceptadas, aceptadas porque se nutren de un torrente semiótico común que posibilita su decodificación. Así, al entender de qué manera los hombres del Medioevo caracterizaban al bosque como espacio natural de la aventura y del amor comprenderemos mejor que necesidades, temores, deseos y valores atravesaban sus vidas y condicionaban sus prácticas. En suma, a través del análisis de obras literarias del fine amour, trabajadas como fuentes históricas, se han identificado pasajes que nos permitan asir, aunque fuere parcialmente, las representaciones que en torno al bosque se dan cita en el imaginario medieval.