Crataegus monogyna o la esencia del espino: figuraciones del amor en Proust

LUISINA BOLLA; BRUNO BOLLA

Ensenada

Jornada; II Jornadas Marcel Proust; 2017

Centro de Investigaciones en Filosofía, IdIHCS, UNLP

En este trabajo examinamos una de las figuras botánicas de la Recherche: el arbusto de espinos rosa (crataegus monogyna). La hipótesis que guía nuestro trabajo es que el arbusto de espino funciona como un símbolo que permite comprender los vínculos entre amor y sufrimiento, más precisamente, entre amor y dolor corporal, a lo largo de la Recherche. A su vez, este análisis se inscribe en una línea que sostiene la imbricación entre lo humano y lo animal/vegetal, que se expresa a lo largo de toda la novela, reapareciendo en múltiples metáforas. Proponemos primero el abordaje de un episodio del tomo 1, donde surge el arbusto de espino dominando el paisaje del jardín de Swann, en Combray. Estamos del lado de Méséglise; es el momento en que el héroe conoce a Gilberte y, al mismo tiempo, constituye la primera aparición Charlus. Entre ambas figuras se interpone la sombra del arbusto de espinos, cuya estela se mantendrá a lo largo de la novela, hasta el tomo 7. Veremos que el episodio del tomo 1 en el jardín de Swann prefigura aspectos centrales de las relaciones amorosas, que se desplegarán sobre todo en El tiempo recobrado. La reaparición del espino opera allí como imagen que condensa ?sentidos primitivos?, que intersecta temporalidades y con ellas, recuerdos. En este sentido, el espino podría ser analizado como un signo, al modo en que Deleuze (1971) pensó la obra de Proust, la cual no estaría basada en la exposición de la memoria sino en el aprendizaje de los signos.